En la mañanera de este lunes, el presidente López Obrador respondió a los cuestionamientos sobre su visita a Yucatán y el saludo a la diputada trans de Morena, Sandra Luévano, a quien se refirió como “un hombre vestido de mujer”.
Se trata de un hecho muy indignante, pues el máximo dirigente político del país ejerció violencia en razón de género desde la principal tribuna nacional, no solamente contra Sandra Luévano, sino contra todas las mujeres trans quienes son un sector altamente vulnerable.
Como era de esperarse, sus declaraciones causaron gran indignación y repudio entre la comunidad trans y LGBTIQAP+. En redes sociales compararon las declaraciones del presidente con las de Gabriel Quadri en la Cámara de Diputados, cuando en 2022 también se refirió a Sandra Luévano como “hombre vestido de mujer”, lo que le valió una sanción del Tribunal Electoral por ataque de odio.
Fue tanta la presión mediática, el cuestionamiento y el descontento legítimo de la comunidad trans y LGBTIQAP+ por las declaraciones de López Obrador, que éste tuvo que comenzar su mañanera del martes con una disculpa pública a su compañera de partido.
“Quiero iniciar ofreciendo una disculpa a una compañera que se identifica como mujer y yo ayer hablé de que era un ´hombre vestido de mujer´. Yo soy muy respetuoso y creo en la libertad y la gente debe de asumirse, cualquier persona, como se identifique.”
Debates entre la comunidad trans y disidente
La disculpa del presidente fue aceptada por la diputada Luévano así como por simpatizantes de AMLO y Morena, quienes señalan que nunca un presidente hizo una acción parecida, por lo que esto representa un avance importante en la visibilización de la lucha histórica de las personas trans en México.
Sin embargo otro sector de activistas trans, comunidad LGBTPQAP+ y defensorxs de derechos humanos señalan que se trata de una acción completamente insuficiente y tibia, ante la grave situación de violencia y discriminación que viven las personas trans, particularmente las mujeres trans cuyo promedio de vida en México es de 35 años.
Incluso, cuestionaron a la propia Sandra Luévano por la clara diferencia política que hay en su respuesta ante los ataques transodiantes, cuando vienen de la derecha y cuando vienen de su propio partido. Este suceso fue aprovechado por sectores de la derecha y transodiantes para atacar a las mujeres trans, valiéndose de los dichos del presidente.
Morena y las disidencias LGBTIQAP+ , una reflexión necesaria
No hay que olvidar que López Obrador y su partido Morena, tienen entre sus filas a activistas trans y LGBTIQAP+ que cuentan con amplio conocimiento sobre los temas que el presidente ignora. De hecho fueron muchxs lxs activistas trans, LGBTIQAP y feministas quienes, con la convicción de un cambio en 2018, se incorporaron a la militancia política en Morena.
Sin embargo, ni la presencia de activistas trans en Morena ni la incorporación de ejes como la inclusión y la diversidad, han revertido la dura situación de violencia y precariedad en la que viven la mayoría de las mujeres trans y disidencias LGBTIQAP+ en el país.
El problema no es la falta de capacitación y conocimiento, sino la falta de voluntad política por parte de López Obrador y la dirigencia de Morena, para atender de manera estructural las demandas y necesidades de las mujeres, personas trans y LGBTIQAP+. Estando en el poder, han decidido destinar presupuestos millonarios para la Guardia Nacional y el tren Maya, en vez de a garatizar servicios públicos de salud, educación, trabajo y vivienda dignos para mujeres trans en situación de vulnerabilidad.
No es la primera vez que el AMLO, expresa sus posiciones conservadores respecto a las mujeres y disidencias LGBTIQAP, recordemos que hace unos años, propuso someter el derecho al aborto y al matrimonio igualitario a consulta popular. También actual candidata a la presedencia por Morena, Claudia Sheinbahum, congeló la aprobación de la ley del reconocimiento a infancias trans en el Congreso de la CDMX cuando fue jefa de gobierno, aunque ahora en campaña promete que será una aliada de la comunidad.
A unos meses de las elecciones presidenciales y con las indignantes declaraciones del presidente del fondo, es necesario que entre la comunidad trans y disidente, reflexionemos críticamente sobre la experencia política con el gobierno de AMLO y la 4T, así como en la necesidad urgente que tenemos de construir una organización política propia, independiente y anticapitalista que se plantee llever hasta el final la lucha contra la violencia y la discriminación hacia las mujeres trans, cis y las disidencias LGBTIQAP+.
Si estás de acuerdo con estas ideas, te invitamos a organizarte con nosotres y nosotras en Pan y Rosas México. | 
