Posteriormente aseguró que supuestamente la eliminación de los organismos se dará sin afectar a los trabajadores de base, ya que todos quedarán adheridos a las dependencias federales.

Sin embargo, este gobierno se ha caracterizado por incumplir las promesas que ha hecho en el ámbito laboral, o cumplirlas de manera parcial, una vez que ha combatido a trabajadores de distintas formas. Caso emblemático fue el del Sutnotimex. Por lo que no se puede confiar en esa promesa del titular del ejecutivo federal.

Continuando con el tema de esos organismos, dijo que “se analizará cuáles van a desaparecer, (porque) vamos a ahorrar, no vamos a despedir a nadie, pero vamos a tener un gobierno eficiente no tan costoso, le cuesta mucho al pueblo mantener al gobierno”.

No obstante, es poco probable que pueda impulsar este tipo de iniciativas. Lo que ha estado haciendo AMLO en las últimas semanas respecto a este tema, es dar una especie de declaración de buenas intenciones, a sabiendas de que no avanzarán dentro de los estrechos márgenes institucionales.

Eso muestra la necesidad de que la clase trabajadora, en alianza con el conjunto de las y los oprimidos, desarrollemos nuestras propias demandas y luchemos en unidad por su resolución íntegra y efectiva.

Sobre el caso de la madre buscadora de Guanajuato, Lorenza Cano Flores, integrante del colectivo ‘Salamanca Unidos por los Desaparecidos’, reportada como desaparecida luego de que hombres armados irrumpieran en su casa, dijo que no tenía información sobre el tema y aseguró que su gobierno “todos los días protege al pueblo”, señalando que, por ejemplo, Rosa Icela Rodríguez (titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana) supuestamente no es como Genaro García Luna (ex secretario de Seguridad Pública del sexenio de Felipe Calderón).

Luego, continuó defendiendo a la Guardia Nacional, instando a pobladores de Chiapas que permitan que la Guardia Nacional los proteja, porque “esa es la instrucción que tienen”. Pasando por alto la legitima desconfianza que las poblaciones tienen de dicha institución, así como de las Fuerzas Armadas y de las Policías, las cuales está sobradamente comprobado que participan en la desaparición forzada de personas en todo el país. Caso emblemático el de los normalistas de Ayotzinapa.

Sobre este caso, AMLO aprovechó para decir que descarta reunirse con los familiares de los 43 estudiantes desaparecidos, afirmando que “no tenemos nada que ocultar”, pero que presuntamente hay gente de las “supuestas organizaciones no gubernamentales”, “pseudodefensores de derechos humanos” que “tienen intereses políticos”, los cuales no le daban confianza. Luego, prosiguió diciendo “quiero tener una relación directa con los padres, pero los organismos lo impiden”.

Con esto continúa con la retórica de descalificación que se ha vuelto cada vez más continua en contra de grupos como el Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes (GIEI), los cuales han señalado las trabas que este gobierno ha puesto para que se esclarezca la responsabilidad que altos mandos del ejército tuvieron en la noche de Iguala. Ante esto, AMLO ha respondido con fuertes descalificaciones en aras de defender a toda costa a las instituciones castrenses.