En sintonía con la política brutal de ajuste que viene desarrollando el gobierno nacional de Javier Milei, en San Luis, a casi dos meses de asunción, el gobierno provincial y municipal conducidos por la dupla Claudio Poggi y Gaston Hissa, vienen llevando adelante una razia brutal con cientos de despidos en las distintas reparticiones del Estado provincial. Como parte de la agenda del ajuste a nivel nacional, en la provincia de San Luis los despidos sin causas y totalmente arbitrarios no solamente pone en jaque el bolsillo de cientos de laburantes que-de por sí-, ya están condicionados por los altos niveles inflacionarios, el aumento de la comida, el combustible y los alquileres que suscitan en todo el país.
De acuerdo a lo que nos comentó un trabajador del municipio, las pretensiones de Gaston Hissa es continuar con mayores despidos: “la primera tanda, fueron supuestamente por los cargos políticos. Otros que entraron cuando finalizaron las elecciones. Ahora dicen que están echando por legajo: es decir, gente que tiene faltas, certificados y demás. Y falta una lista más que no se sabe a cuenta de que van a echar”.
Los trabajadores, junto a la central sindical, se incorporaron portones adentro del municipio a primeras horas de la tarde, concurrió una jornada pacífica dónde los implicados esperaron pacientemente una respuesta de la intendencia que nunca llegó.
Fue recién a las 19 hs que abandonaron el recinto municipal y luego de un breve discurso, el secretario general, Fernando Gatica explicó que a partir de mañana, a las 19 hs se instalarían con una carpa de la “dignidad municipal” que se sostendría del apoyo solidario de la comunidad y las distintas organizaciones que ayuden a sostener la lucha por la reincorporación inmediata de los más de 200 trabajadores despedidos a destajo.
Resaltaron, además, testimonios de trabajadoras despedidas, único sostén de familia que estaban dispuestas a “encadenarse” en forma de protesta por la grave situación económica que atraviesan. Ya que no cuentan con los medios para abonar el alquiler, ni la comida de su hijo que se encontraba en sus brazos.
Mientras esto sucedía, el intendente Gastón Hissa se encontraba posteando en redes sociales amenazando con denunciar a los trabajadores que ingresaron al municipio a llevar sus reclamos, ya que se encontraban identificados en lugar de dar una respuesta concreta y a la altura de su cargo a las 200 familias que se encuentran en lucha en este momento.
Por último, se llamó a la solidaridad de gremios, y otras organizaciones a sumarse y acompañar la lucha de los trabajadores estatales en la provincia de San Luis. |
