Estamos ante un ajuste a la escuela pública, a comedores escolares y salarios docentes, recorte del FONID y cancelación de la paritaria nacional. El gobierno de Milei se juega a golpear fuerte a la docencia y a las familias de las escuelas mientras crece la inflación y la pobreza. Exigimos a CTERA un plan de lucha nacional con paros de no inicio y movilizaciones. Tenemos que construirlo en asambleas junto a la comunidad educativa, las familias y los estudiantes.

El ataque a la educación por parte del gobierno de Milei empieza por un importante ajuste al salario. Para comparar hay que remontarse a los recortes de salarios en manos de Lopez Murphy en 2001, como ministro de economía de De La Rúa. La quita del FONID hará que provincias como Córdoba, no pague esta suma significando una rebaja nominal del salario docente de entre un 8 y un 20% por cargo (que difiere el monto por provincia, ver cuadro). Otras jurisdicciones, como en CABA, pagarán este mes y ya anunciaron que el próximo mes no. En la Provincia de Buenos Aires, Kicillof anunció que no sabe cuantos meses pueda sostenerlo mientras pactó con Baradel salarios por debajo de la inflación. Esto se suma a la provocación del gobierno cancelando la paritaria nacional docente. En medio de una escalada inflacionaria, se necesita una respuesta inmediata en defensa de nuestro salario.

Sobre el sistema educativo, utiliza las leyes existentes para profundizar la herencia neoliberal, quitando al estado nacional de cualquier responsabilidad sobre la educación y delegando todo en las provincias. Comenzando la cancelación de los fondos hacia salarios y bloqueando el envío de dinero hacía a comedores, cooperadoras e infraestructura escolar en medio de un fuerte ajuste. Esta situación, se da sobre los recortes que ya vienen implementando los gobernadores de las diferentes provincias. El FMI festeja los avances de su plan de achicar el déficit con ajuste al pueblo.

Milei hace un ajuste tan cruel, que recorta los ya miseros presupuestos destinados a darle muchas veces el único plato de comida de las niñeces que recibimos en las escuelas, más del 60% pobres y sus hogares golpeados por inflación, tarifazos, despidos, suba en los alquileres, alimentos y transporte. Son muchas las familias que ya están pidiendo las viandas, preguntan si están abiertos los comedores o si sobró alguna leche. Son las familias de nuestros estudiantes, que no tienen para comprar útiles, mochilas o alimentar a sus hijos e hijas. Hace demagogia con una medida insuficiente como el aumento de la ayuda escolar, cuyo monto no llega a cubrir una canasta escolar promedio.Esto hará profundizar la desigualdad social, acrecentando la pobreza y la indigencia infantil.

Como otra cara de la misma moneda, favorece el negocio de las escuelas privadas proponiendo que sigan sin pagar aportes patronales y hace demagogia vaucherizando “la oferta” con un bono a las familias, a sabiendas que con el incremento de precios de las escuelas privadas muchas familias no podrán sostener las cuotas y ya muchas están pidiendo el ingreso a la pública.

El ataque a las organizaciones sindicales intentando limitar el derecho a huelga con la declaración de “servicio esencial”, que según trascendidos lo presentaría por decreto esta semana. Esto no significa que habrá más dinero para educación sino que se deja de concebir a la educación como un derecho social básico, intenta bloquear la posibilidad de huelgas nacionales y provinciales, habilitando el “ítem aula” por provincias como quieren en Córdoba. Fue lo que dijeron Bullrich, Milei y Massa en campaña electoral. Cristina Kirchner, en su último documento, también habló de la elección de las familias de escuelas privadas donde no hay paros docentes.

Hay que parar este ataque y enfrentarlo nacionalmente

Quedan apenas días para el inicio de clases en las primeras provincias y cada día que pasa el gobierno crece en la provocación a las y los docentes. En primer lugar se hace necesario que CTERA, un gremio nacional que está en todo el país llame urgente a asambleas por escuela y por provincia para la construcción de un paro nacional de no inicio que sea el comienzo de un plan de lucha y una gran campaña en defensa de la escuela pública, por nuestro salario y las condiciones de vida de nuestras familias de la escuela. Tenemos que pelear por el pago del Fonid, que no haya ningún descuento ni rebaja salarial y un aumento urgente para recuperar lo perdido por la inflación con un salario igual a la canasta básica familiar por cargo, hoy estipulada en $900 mil.

El gobierno nacional ataca y la burocracia divide junto a los gobernadores, se debaten en quien recorta o asume el costo del ajuste pero ni el gobierno de Milei ni los gobernadores ajustan dónde está la plata, que son los grandes empresarios del campo, de las grandes industrias, las mineras, es decir los grandes grupos económicos concentrados que se la llevan en pala. Por eso es central rodear de solidaridad cada escuela, apoyar la lucha educativa tenemos que plantear una perspectiva de lucha nacional que pueda torcer el brazo a Milei. Para eso necesitamos construir este plan para que sea masivo junto a toda la comunidad educativa, construyendo asambleas de docentes, familias y estudiantes. Con jornadas nacionales, paros, movilizaciones, jornadas de protesta, que sean provinciales, por zonas y en cada escuela. Denunciar el ajuste en comedores y exigir aumento en raciones, cantidad y calidad de la comida que se brinda en las escuelas públicas y en los barrios, por entrega de útiles a cada estudiante, de libros y tecnología, de guardapolvos, vestimenta y todo lo necesario para concurrir a la escuela, junto con boleto educativo para todas las familias y estudiantes de todos los niveles educativos. Las asambleas barriales así donde surgieron con fuerza, que organizan familias de las escuelas, están haciendo festivales solidarios para juntar útiles para los chicos. Un gran apoyo para esta lucha en común.

Desde la 9 de Abril exigimos a CTERA un plan de lucha de no inicio con paros y movilizaciones al inicio de clases el 26 de febrero donde muchas provincias inician sus ciclos lectivos, junto a una jornada de lucha y movilización federal/marcha blanca hacia el Congreso el 1ero de Marzo que empiezan otras provincias y que coincide con que Javier Milei irá al Congreso a dar inicio a las sesiones legislativas, ya hay organizaciones y asambleas barriales que marcharán hacia el congreso. Continuando con un gran paro el 8 de marzo, en un gremio de mayoría compañeras y mamás de familias sostenes de hogares de la escuela pública junto a otros sectores de trabajadoras. Solo como un comienzo de una gran batalla contra este gobierno.

Un importante apoyo para todo esto, son las fuerzas de las asambleas barriales, de los sindicatos docentes combativos como Ademys y Cedems, seccionales opositoras como Aten Capital, Amsafe Rosario, Uepc Capital y las seccionales de los SUTEBAs como Tigre y Bahía Blanca, autoconvocados en diferentes provincias y toda la fuerza de la oposición docente a nivel nacional que viene coordinando hace tiempo. Junto a nuestros compañeros y compañeras de las bancas del Frente de Izquierda como Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Christian Castillo, Alejandro Vilca y Romina del Pla que desde adentro del Congreso denuncian esta situación y llaman a enfrentarlo en forma organizada, en las calles y le ponen el cuerpo junto a nosotros y nosotras.