A este medio fueron llegando las imágenes de los barrios que por la mañana de ayer ya estaban inundados, al igual que las rutas y daños en los edificios escolares, para el mediodía casi la totalidad de las escuelas habían suspendidos sus clases presenciales, no solo para garantizar la integridad física de la comunidad educativa, sino porque los estudiantes sus familias, docentes-auxiliares, están bajo el agua, sin luz y en algunos lugares sin agua.
Es un desastre porque afecta directamente a nuestra vida, al ecosistema, al medioambiente y es una consecuencia ambiental, porque los gases del efecto invernadero que los empresarios mediante una producción sin control a costa de mayor contaminación, soltaron a la atmósfera, calientan el planeta, almacenando humedad en el aire aumentando las precipitaciones más extremas .A mayor concentración de gases de efecto invernadero, mayor es la retención del calor. Esto gases extras incrementan el efecto invernadero natural y provocan el calentamiento global en el clima: El cambio climático, por eso varios analistas empiezan hablan de mayor clima más sub tropical en el país- Lejos de la negación de esta problemática por parte del gobierno de Javier Milei, hoy salta por todas las alcantarillas.
Pero también es una crisis social, que deja sin techo a cientos de familias, que pierden todo cada tormenta, 7 de cada 10 niños son pobres y hoy están sin nada caliente. Las escuelas con serios problemas de infraestructura, es producto de la falta de inversión del gobiernos nacional de Milei, provincial de Axel Kicillof y Municipal de Santiago Passaglia, que al igual que los anteriores gobiernos no ejecutaron un plan de obras públicas al servicio de las necesidades de las /los trabajadores y el pueblo pobre. Aunque digan que no hay plata para infraestructura, resulta que para operativos represivos y cárceles sí hay.
Las obras hidráulicas inconclusas por parte de la provincia o mal hechas, la prioridad del desmonte y deforestación por parte del gobierno municipal y los negocios inmobiliarios solo para la especulación dejan a la vista su responsabilidad. Esto no es natural en el siglo XXI, hay avance tecnológico, para una mayor planificación urbana de la ciudad, hay recursos en el medio de dos gigantes del acero como Acindar y Siderar. No podemos naturalizar la miseria, de los miserables de siempre.
Llamamos desde este medio y en cada escuela a la más amplia solidaridad con las familias damnificadas. Los sindicatos de la CTA y CGT deben ponerse a la cabeza y abrir sus lugares para ayudar a las familias. Además necesitamos un serio plan de obras públicas, bajo la gestión de los trabajadores y damnificados. ¡Plata hay! Mediante el impuesto a las grandes fortunas y si los funcionarios públicos como Milei se dejaran de aumentar el salario casi un 50 %. Necesitamos un verdadero plan de lucha impuesto desde abajo a las centrales sindicales; por Mayor presupuesto para vivienda, educación y salud. Nuestras vidas valen más que sus ganancias. |
