Tras más de 3 días de tensas negociaciones, este miércoles el oficialismo junto a la Democracia Cristiana inscribieron su pacto electoral de cara a las primarias del próximo 9 de junio.

Los timoneles de las diversas colectividades de los partidos de Apruebo Dignidad y Socialismo Democrático celebraron la inscripción del pacto que les permitirá definir las candidaturas para 86 alcaldías.

Aunque con matices. Paulina Vodanovic, del PS, sin tanta alegría manifestó “Hemos tenido que ceder, en nuestro caso, con mucho dolor en algunas comunas, porque eran comunas históricas, socialistas, donde teníamos grandes compañeros de candidatos. Y quiero decir que ha sido muy difícil“.

Los que sacan cuentas alegres son los falangistas de la DC. Alberto Undurraga, timonel falangista, señaló “nos vamos muy contentos, logramos un buen acuerdo para Chile y la DC. Todos nuestros alcaldes van a la reelección, pudimos convencer a nuestros amigos de pacto que era bueno el criterio de aquellos que no iban a la reelección fuera un 60% del mismo partido, el mismo liderazgo de los alcaldes y alcaldesas y que el otro 40% que estuviera en primarias”.

Esto quiere decir que, de las 20 alcaldías que actualmente tiene la DC y que no pueden reelegirse, el 40% será para un candidato falangista (8 comunas) y el otro 60% iría a primarias (12 comunas).

Por otro lado, hay 48 comunas donde habrán derechamente primarias debido a que los alcaldes actuales del oficialismo no pueden ir a la reelección. Esto ocurre en 19 cargos de la DC, siete corresponden al PPD, cinco al Partido Socialista, 4 al Partido Radical, 2 al Partido Comunista y uno a Convergencia Social, más 10 independientes en pacto electoral.

¿Qué se puede esperar de un pacto de este tipo?

De este pacto sólo salen fortalecidos los partidos de los 30 años, a los que el Partido Comunista les presta una pata izquierda para continuar administrando los pilares económicos de la dictadura y profundizar la herencia neoliberal.

Por más que en su retórica hablen de la “unidad” para enfrentar a la derecha, estos proyectos sirven especialmente para lavar la cara a quienes por 30 años administraron el modelo al servicio de los grandes empresarios sin modificar sustancialmente la administración municipal.

Los trabajadores y el pueblo no pueden confiar en estos proyectos que bajo un discurso contra la derecha se disfrazan como “amigos del pueblo” cuando en verdad son lobos en piel de oveja que, como lo ha demostrado el gobierno de Boric, terminan cediendo a los proyectos de la derecha, fortaleciéndose su agenda y su discurso.

Es necesaria una alternativa que pelee por una política de los trabajadores independiente del gobierno de Apruebo Dignidad y Socialismo Democrático, que luche por la unidad de los trabajadores y el pueblo, coordinados y organizado desde las bases. Esta es la apuesta que el Partido de Trabajadores Revolucionarios, que también presentará candidaturas en octubre, busca desarrollar en Antofagasta en el marco de la movilización docente, buscando unir las demandas de los trabajadores, estudiantes y apoderados en un pliego único de demandas, en contra de la política de los partidos de gobierno al interior del Colegio de Profesores que evitan confrontar al gobierno de Boric.

En octubre, el Partido de Trabajadores Revolucionarios buscará repostular a Natalia Sánchez, médica del Hospital Regional y Concejal Municipal por Antofagasta, además de otros candidatos trabajadores y luchadores, para ponerse a disposición movilización, la organización y la lucha de todos los trabajadores y el pueblo.