"Trenes Argentinos comunica que una formación de la línea San Martín colisionó con una locomotora y un coche furgón vacío, a las 10.31, en el kilómetro 4,900 sobre el viaducto Palermo a la altura de la avenida Alcorta". Así dice el escueto mensaje del gobierno, que agrega que trabaja personal de emergencias.
Las imágenes que comenzaron a circular son impactantes. Vagones de pasajeros con fuertes destrozos, personal de rescate y el SAME trabajando en el lugar.
Se dispuso un alerta roja en el sistema de hospitales porteños para recibir a los heridos.
El parte desde el lugar asegura que "Bomberos de la Ciudad se desplazó esta mañana hasta la avenida Figueroa Alcorta y Dorrego por una colisión de dos formaciones del ferrocarril San Martín, una con pasajeros y otra con material de trabajo de vías. Un total de 16 personas con algún tipo de lesión fueron trasladadas por ambulancias del SAME a los hospitales Rivadavia, Pirovano y Fernández, en tanto también fue despachado el SAME aéreo".
El accidente se da en el marco de un fuerte debate por el sistema ferroviario. Desde que asumió, el gobierno de Milei ha impulsado un desguace y vaciamiento de muchas áreas de Trenes Argentinos, afectando tareas de obras y mantenimiento. Además amenaza con miles de despidos.
Trabajadores ferroviarios enterados del accidente aseguraron que en el San Martín no andaban las señales desde más de un mes ya que tras un robo de los cables. La empresa por el ajuste nunca los repuso. La confirmación vino hace minutos de parte del Secretario General del sindicato La Fraternidad, Omar Maturano. Aseguró en una entrevista radial que "hace 10 días que estamos trabajando sin señalamiento, debido a la degradación en el ferrocarril y falta de seguridad". Dijo que "se roban los cables" de señalamiento y "los trabajadores de la línea San Martín están resolviendo sus labores haciendo señas con una bandera verde o con un papel".
Lo que no explicó Maturano es por qué desde la conducción del gremio permitieron que se trabaje en esas condiciones. La denuncia, escandalosa, explica cuáles son las causas y quiénes son los responsables del hecho: las autoridades de Trenes Argentinos y el gobierno.
Queda claro que la política privatizadora es una amenaza no solo al patrimonio y los puestos de trabajo, sino también a la vida de cientos de miles de pasajeros.
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