Por la tarde de este viernes todo era calma entre los vecinos y los trabajadores feriantes del barrio 1-11-14 del Bajo Flores. Pero la tranquilidad fue violentamente interrumpida por decenas de efectivos uniformados de la Gendarmería Nacional y la Policía de la Ciudad, que mediante gases, disparos y golpes irrumpieron entre los puestos de mercadería.
Además de los daños en las vía respiratorias provocados por la inhalación de los gases tóxicos, los vecinos denunciaron que varias personas terminaron heridas. En las imágenes que fueron capturadas se puede ver a un adolescente con el rostro ensangrentado y una marca de herida a pocos centímetros de su ojo izquierdo. Una metodología represiva totalmente ilegal de apuntar al rostro, que viene siendo aplicada por la ministra Bullrich.
Según algunos testimonios la presencia de los efectivos en el lugar se debió a algún allanamiento en un local comercial, pero ninguna autoridad del Gobierno de la Ciudad pudo dar explicaciones de la represión a feriantes y vecinos del barrio.
Estas nuevas escenas de brutalidad policial se dan a tan solo dos días del enorme operativo represivo desplegado en las afueras del Congreso mientras se discutía la regresiva Ley Bases en el Senado. Provocadores, infiltrados y policías de civil fueron parte de un operativo que además de reprimir violentamente a quienes se manifestaban, se llevó detenidas de forma arbitraria e infundada a 35 personas por las cuales diversas organismos de Derechos Humanos reclaman su inmediata libertad.
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