El estacionamiento de Torre de Rectoría de la Universidad Autónoma de Sinaloa en Culiacán fue el escenario del supuesto atentado a balazos contra la vida del Director de Comunicación Social, Arnoldo Valle Leyva, conocido por sus desplantes violentos y sus prácticas represivas contra trabajadores, docentes y estudiantes, por el obsceno enriquecimiento que ha logrado gracias al desvío de recursos de esta institución pública de educación superior y por su afición a los montajes para combatir a adversarios democráticos de la comunidad universitaria.
Todo ocurrió la tarde de este viernes 5 de julio. Si el atentado fue genuino, Valle es afortunado: salió ileso. Sus agresores se dieron a la fuga, a pesar de que la salida de las instalaciones de rectoría no les quedaban muy cerca del lugar de los hechos. Parece ser que nadie los vio. De ser cierto, se trató de pistoleros veloces, atléticos.
Hablar de Arnoldo no es referirse a cualquier funcionario. Es un "pez gordo" de la casta dorada uaseña. Medios de comunicación locales han dado cuenta del meteórico crecimiento del patrimonio de este funcionario a quien se le conoce también como alias "El Inge": Yates, casas, camionetas y carros de lujo son algunas de sus adquisiciones en los últimos años. Ser un incondicional del cacique multimillonario Héctor Melesio Cuén Ojeda y de la cúpula del ultra derechista Partido Sinaloense (PAS) le ha dado estos beneficios.
Valle es un personaje siniestro, identificado por trabajadores y docentes de la UAS por ser uno de los principales operadores de la represión que desde hace casi dos décadas ejerce el cacicazgo universitario del magnate Melesio Cuén para dominar a esta universidad y continuar enriqueciéndose a costa de su presupuesto, el cual asciende a más de 7 mil millones de pesos.
En distintos diálogos que durante los últimos tres años La Izquierda Diario ha establecido con estudiantes y trabajadores de la UAS, sale a colación en repetidas ocasiones que Arnoldo Valle, como Director de Comunicación Social, es el encargado, junto a "comunicadores" como Álvaro Aragón Ayala de operar una red de difamación y montajes al servicio de Melesio Cuén y su familia.
De hecho, Álvaro, desde su sitio “Voces Nacionales” rápidamente publicó una nota denunciando el supuesto ataque contra Arnoldo, y aludiendo a que se debe a una “campaña de odio” que hay contra los funcionarios de la UAS. Sin embargo, nada de lo que diga Aragón puede ser creído: desde ese mismo medio criminaliza sin ningún pudor a estudiantes acusándolos infundadamente de asesinato y narcotráfico.
La veracidad del atentado contra Valle se pone aún más en duda ya que a lo largo de esta tarde el militante del Movimiento Democrático Estudiantil de la UAS, Óscar Mata, denunció estar recibiendo amenazas en redes sociales tras compartir unas reflexiones sobre los hechos que ocurrieron en rectoría. Óscar, estudiante de la Facultad de Derecho en Culiacán, es uno de quienes Aragón ha estado criminalizando en "Voces Nacionales".
Esta red y este personaje ─o sea, Arnoldo Valle- se asemejan a la estructura que en la UNAM encabezó Teófilo Licona –alias "El Jefe Cobra"- y que se relaciona, por ejemplo, con la campaña de difamación y hostigamiento de la que fue objeto el activista y estudiante de dicha universidad Carlos Sinuhé antes de ser ejecutado extrajudicialmente hace trece años.
Como hemos mencionado en la UAS a Valle se le relaciona, según testimonios recabados, con la coordinación de la estructura parainstitucional que opera para realizar labores de inteligencia al servicio del cuenismo: desde ordenar la intervención de Smart phones y computadoras de la comunidad universitaria vía las redes wifi, hasta la creación de videos e imágenes pornográficas mediante inteligencia artificial para denostar a adversarios y adversarias, pasando por la maquinación de autolevantones y autoagresiones que se infringen porros cuenistas y autoridades para decir que los trabajadores y estudiantes democráticos los agreden, así como campañas de criminalización en redes sociales y medios digitales como Proyecto 3, Voces Nacionales, Gremio News, Mujeres por Sinaloa, entre otros.
Altamente intolerante y violento, Arnoldo Valle comúnmente anda armado. A finales de mayo en Culiacán, durante la marcha de la “Marea Rosa” impulsada por la coalición electoral de los partidos de la derecha a nivel nacional, medios de comunicación reportaron que Valle amenazó con pistola en mano a un militante de su propio partido, el PAS, por algunas diferencias que tuvieron respecto a declaraciones en medios de comunicación referentes a la defensa jurídica de dirigentes pasistas por el presunto desvío multimillonario de recursos de la UAS.
Y es que actualmente funcionarios y exfuncionarios de la UAS ligados al PAS están siendo llevados a juicios por el presunto desvío de más de 700 millones de pesos del presupuesto universitario que fueron a parar a bolsillos de la familia Cuén Díaz y empresarios vinculados al Partido Sinaloense, instituto político que fue creado en 2012 por el cacique en comento a través de métodos clientelares y violencia gangsteril.
Sin embargo, Arnoldo, como asesor del cacicazgo universitario en materia de Comunicación, ha aconsejado de manera reiterativa que se declare a medios que detrás de los juicios no está el evidente desvío de recursos, sino la inverosímil razón de que la UAS es perseguida políticamente por ser “la segunda mejor universidad del país en indicadores de calidad” y porque sus autoridades son las más grandes defensoras de la autonomía universitaria a nivel nacional.
Esto último, supuestamente, porque están luchando contra las iniciativas de reforma a la Ley Orgánica de la UAS que en estos días se discuten en el Congreso Local, las cuales fueron hechas llegar por trabajadores, docentes y estudiantes.
Lo que al cacicazgo le hace ruido es que varias de esas propuestas plantean que la totalidad de la comunidad universitaria pueda elegir a sus autoridades a través del voto unitario, universal y nominal, modificando el método actual que es a través de una terna que la Comisión Permanente de Postulación le presenta al Consejo Universitario para que este de ahí elija a rector y directores.
La mencionada Comisión, hay que decir, es controlada totalmente por el cacique Cuén, determinando en última instancia que sea lo que sea que el Consejo Universitario elija, será una de las opciones que él ha puesto sobre la mesa. Aunque también, hay que decirlo, este cacique controla al propio Consejo, mismo que es integrado a través de elecciones realizadas con convocatorias muy limitadas, a discreción, y donde siempre se bloquea a los sectores democráticos de la UAS.
En resumen, Cuén y su séquito temen perder el control de la universidad y para ello llevan a cabo todo tipo de montajes; es la política ficción llevada hasta extremos inimaginables. Ya lo han hecho: en el marco de las elecciones pasadas, para apoyar a la derecha y amarrar su diputación federal pluri, Cuén ordenó que dos dirigentes pasistas hicieran el teatro de un autolevantón con el que desaparecieron unos días. Antes de la milagrosa aparición de ambos sin ningún rasguño, el cacique dio conferencias de prensa donde acusó a conocidos periodistas democráticos del Estado de estar relacionados con el crimen organizado y con los supuestos levantones.
Tomando en cuenta la forma en que han estado actuando hasta ahora los integrantes de este cacicazgo, victimizándose y pidiendo el apoyo de otras castas doradas universitarias cohesionadas en instituciones como la ANUIES y la CONTU, vale la pena preguntarse, ¿Estas se solidarizarán con ellos a través de comunicados relacionados con el muy probable montaje que tiene como protagonista a un funcionario de estas características? No debe sorprender que lo hagan en este o en próximos días. Sus intereses como castas burocráticas, capitalistas y antidemocráticas las unen.