El plenario nacional de delegados de los trabajadores aceiteros de todo el país se reunirá el próximo miércoles 24 por primera vez en la ciudad de San Lorenzo, el corazón del complejo agroexportador. Está convocado por las dos organizaciones obreras que nuclean a todos los aceiteros y aceiteras: el Sindicato Aceitero del cordón industrial del norte del gran Rosario (SOEA) y la federación aceitera (FTCIODyARA).
"Ahí se van a reunir 250 delegados aceiteros de todo el país para analizar respuestas al plan Milei. Afectados por el regreso del Impuesto a las Ganancias, pueden paralizar el comercio de granos desde el corazón del polo oleaginoso, como ya lo hicieron cuando Milei era apenas un panelista", señala Diego Genoud en su columna en El Destape.
En alerta por “los ataques del gobierno al movimiento obrero”, se proponen “debatir y llevar adelante medidas de fuerza para enfrentar las políticas del gobierno de Milei, de destrucción del salario y defender los derechos de los trabajadores atacados por la reforma laboral y la vuelta del impuesto al salario.” Durante el debate y votación de la Ley Bases en la Cámara de Diputados los trabajadores aceiteros impulsaron un contundente paro con piquetes que paralizaron los puertos agroexportadores y durante la sanción en el Senado el gobierno dictó una conciliación tramposa para evitarlo. La vuelta del impuesto al salario será motivo de debate de nuevas medidas de lucha.
“Los derechos conquistados en los últimos años de lucha obrera contra la tercerización, el uso del sistema de contratistas y distintos fraudes para precarizar a quienes trabajamos, la destrucción de los salarios y la derogación del impuesto al salario, hoy son atacados por la política del gobierno nacional” señalan en la convocatoria. El gobierno en la sanción de la Ley Bases incluyó el reemplazo de las indemnizaciones por un “fondo de cese laboral”, aumento de los períodos de prueba y legalizó ataques antisindicales: la inclusión de los bloqueos y protestas en los portones como causal de despido es un mensaje que busca disciplinar los reclamos obreros.
Ganancias millonarias para unos pocos: 17.000 millones de dólares
Nunca pierden. El balance de la cosecha 2023 - 2024 arroja una cifra impactante: 50 millones de toneladas valuadas en 17.223 millones de dólares. Con estas cifras en silobolsas los empresarios agroexportadores presionan por una nueva devaluación, para maximizar aún más sus ganancias.
El complejo agroexportador del sur santafesino explica alrededor del 50% de las exportaciones del país. El grueso de las cosechas salen por puertos que en su gran mayoría pertenecen a empresas multinacionales de EE.UU, Europa o China. Viterra, Cargill, AGD, Molinos, Dreyfus, Bunge, Cofco y ACA concentran el 93% de las exportaciones del complejo sojero en Argentina. Son ganancias exorbitantes sobre la base del saqueo de los recursos naturales y el monocultivo de soja; una altísima rentabilidad que permitiría reducir las horas de trabajo a jornadas de 6 horas -sin reducción salarial- para crear miles de puestos de trabajo; invertir en infraestructura y reorganizar la producción para abastecer de alimentos y aceite barato a la población.
Enfrentar los ataques del gobierno y las patronales
El debate de los trabajadores aceiteros apunta a cuestionar las ganancias exorbitantes de este sector empresarial, mientras la población se hunde en la miseria. Contrasta con la posición mayoritaria de la CGT: sus principales dirigentes se reunieron la semana pasada con el secretario de Trabajo, Julio Cordero. Héctor Daer, Carlos Acuña, Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri mientras crecen los despidos en el país apenas solicitaron medidas para atenuar los efectos de la ley Bases. Son cómplices de las medidas contra las grandes mayorías que viene tomando el gobierno libertario.
El plenario aceitero debatirá su plan de acción frente a las políticas del gobierno nacional y de los gobernadores que lo respaldan. Frente al ajuste en curso, la perspectiva para todos los laburantes del país tiene que ser coordinar y apoyar activamente cada pelea en curso.
Si los trabajadores de este sector estratégico resuelven en el plenario nacional medidas de lucha contra el ajuste y la vuelta del impuesto al salario sería un importante empuje a la pelea del conjunto de los trabajadores contra la inflación, los bajos salarios y los despidos. Conflictos como el de FATE, la resistencia a los despidos en fábricas como Acindar o entre los estatales y otros podrían estar mucho más unidos, fortalecidos y rodeados de solidaridad. Y empujaría a que la CGT y la CTA tengan que abandonar la tregua con el gobierno y convocar a medidas de lucha, lo que fortalecería cada reclamo.
Si los aceiteros salen a la lucha, hay que rodearlos de apoyo para que ganen. Empezando por los sindicatos de la CGT de San Lorenzo. Y desde cada lugar de trabajo, desde cada barrio organizar la fuerza necesaria para imponer a las centrales sindicales el fin de la tregua y retomar el camino de los paros nacionales, como parte de un plan de lucha que avance a la huelga general para derrotar el conjunto del ajuste de Milei, el FMI y las grandes patronales. | 
