El viernes pasado, 2 de agosto, la firma Mastellone Hermanos S.A. presentó ante la Comisión Nacional de Valores (CNV) sus estados contables al cierre del período del 30 de junio de 2024. Del informe se desprende una ganancia neta de $56.096 millones. Un incremento muy importante ya que en 2023 la empresa había argumentado una pérdida de $13.189 millones. Descontando el pago de impuestos la ganancia integral total fue de $29.960 millones.
En el rubro de la producción láctea, la Serenísima junto a Sancor y Danone acaparan el 75% de la facturación total. Según el Indec, para junio de este año el rubro de leche y productos lácteos tuvo un incremento interanual del 293,7% para la región del GBA, 20 puntos porcentuales por encima del nivel general de incremento de precios, de 273,7% para el período junio 23-24.
Un informe del Cepa indica que en los primeros 5 meses del año el consumo de leche cayó 19,5%, siendo el mes de mayo el de mayor caída con un desplome del 30%. La situación del consumo es alarmante. Mientras que en Argentina se estima un consumo promedio de 200 litros de leche por habitante por año, el INTA indica que esta cifra ha bajado a 187 litros en la actualidad. El Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) informó sin embargo que en 2023, se consumieron 192,8 litros por habitante, pero si se proyectan los datos del primer semestre de 2024, el consumo anualizado se reduciría a solo 122 litros por habitante.
En la publicación del CEPA se destaca que “es importante destacar el grado de concentración del segmento industrial de la cadena donde las primeras 10 firmas representan el 46,5% de la participación en la producción de leche. Por encima de los 3 millones de litros de leche recibidos por día se encuentran únicamente 2 firmas (Saputo y Mastellone Hnos.) que explican el 22,4% de la producción.”
Milei mintió: la plata se la llevaron las grandes empresas
En mayo pasado, cuando dio a conocer su información contable al 31 de marzo de 2024, Mastellone Hnos había resaltado su apoyo a las políticas del gobierno de Javier Milei: “Las necesarias medidas económicas que implementó el nuevo gobierno para equilibrar las cuentas públicas, cortar la emisión monetaria, y aumentar reservas, han tenido un fuerte impacto en la actividad económica y los niveles de consumo. Es de esperar que la recuperación sea gradual en lo que resta del año. La estacionalidad del ciclo biológico, combinado con un pronóstico climático más benigno, y costos estables, auguran un aumento en la producción de leche en los meses de invierno y primavera, a nivel nacional. Sin duda, el proceso de estabilización de las variables económicas, serán muy positivas para darle previsibilidad y por ende crecimiento a nuestro sector”.
Además de haber terminado con los controles de precios a la leche, Milei prorrogó hasta junio de 2025 el no cobro de las retenciones a la actividad y viene de decir en la última Exposición Rural de Palermo que la medida pasará a ser para siempre.
La difusión del informe sobre los estados financieros intermedios al 30 de junio de este año en la CNV estuvo limitada a las cifras generales en una hoja de word. El único archivo adjunto que acompañó esos datos fue el acta de la reunión del directorio donde se aprobó el informe.
Mientras tanto, este viernes se conocieron los datos abiertos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) para el primer trimestre del año. Un estudio de la UCA de éstos datos, muestra que en Argentina la pobreza alcanzó al 54,9 % de la población y la indigencia al 20,3 %. Siendo que 7 de cada 10 niños y niñas es pobre, mientras que 3 de cada 10 lo hacen en un hogar indigente, es decir con ingresos que no cubren el valor de un Canasta Básica Alimentaria (CBA), informó el director del ODSA, Agustín Salvia.
Es escandalosa esta cifra de grandes empresarios de la alimentación amasando fortunas, mientras cada vez más niños y niñas son negados al derecho básico de alimentación, de su leche. Todo esto con la colaboración de la “casta política” que festeja el plan de Milei, una oposición cómplice que ha votado con el gobierno en la Cámara de Diputados y en el Senado la Ley Bases, y las centrales sindicales cómplices de la CGT y CTA que no dio ninguna lucha consecuente.
Ante el crecimiento de la crisis social hay que garantizar la provisión de los alimentos a los comedores populares y que el Estado nacional gire los recursos del Servicio Alimentario Escolar a las provincias. A la vez hay que incrementar el Salario Social Complementario para que cubra la media canasta familiar.
También en estas grandes empresas que amasan fortunas, es necesario repartir las horas de trabajo, reduciendo la jornada laboral a 6 horas sin afectar el salario. Una medida para garantizar empleo ante el avance de la crisis y el desempleo, con un salario mínimo que cubra la canasta familiar actualizado mensualmente según la inflación. De esta forma, afectando a las 12 mil grandes empresas del país podrían crearse un millón de puestos de trabajo de calidad.
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