Este miércoles en una nueva edición del evento Council of the Americas Milei habló en el Hotel Alvear ante empresarios, pasó de autodefinirse como héroe para en esta ocasión decir que "el mundo está hablando del milagro argentino" (en referencia a las declaraciones de Donald Trump en ese sentido). El hecho de carácter divino consistiría en haber bajado la inflación, que él mismo había elevado, mediante un duro recorte del gasto público y una recesión sólo comparable con las peores crisis del país.
Las consecuencias las están sufriendo los jubilados por la pérdida de sus haberes frente a la inflación y las familias trabajadoras debido al deterioro de los salarios y el aumento del desempleo. En pocos meses, Milei, sumergió a casi 5 millones de personas más en la pobreza y según datos de la Unicef 1 millón de niños se van a dormir sin comer porque sus familias no pueden darles de cenar.
Quizás el único momento realista de la disertación fue cuando el Presidente reconoció la falta de inversiones para que la economía se reactive. “Eso lo tienen que hacer ustedes, vamos, háganlo” les suplicó Milei a los empresarios. Pero con el consumo en caída y el cepo al dólar vigente que les dificulta fugar sus ganancias al exterior, el capital concentrado prefiere apoyar los ataques del Gobierno a las grandes mayorías y no soltar un peso hasta que tengan aseguradas mejores condiciones.
El presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Mario Grinman intervino en ese sentido al declarar que: “La actual gestión dio inicio a un camino de transformación, tan necesario como tantas veces postergado” y a la vez victimizarse al afirmar: “Numerosas empresas padecen por las escasas ventas“. No es el caso de los empresarios de la alimentación como Mastellone Hermanos (La Serenísima) que tuvieron ganancias por $56.096 millones en el primer semestre del año, a pesar de que el consumo de leche descendió.
En cuanto al Presupuesto 2025 el Presidente informó que: “Vamos a rediseñar la forma en que se escribe. Nuestra metodología se va a llamar déficit cero y eso implica que el resultado financiero es cero”. Así volvió a insistir con la política de ajuste permanente para achicar el Estado y seguir entregando los derechos de las grandes mayorías a la especulación de las multinacionales; como hizo este lunes con el decreto para privatizar cuatro represas hidroeléctricas.
Milei se volvió a mostrar indignado con los economistas que no forman parte de su gestión porque "todo el mundo ve el milagro, menos los argentinos". Con el Banco Central sin dólares y vencimientos de deuda externa impagables es muy difícil ver un futuro de estabilidad para el Gobierno. El Presidente agregó que: "Nosotros no estamos dispuestos a devaluar para arruinar a los argentinos, vamos a trabajar en cambiarle los niveles de productividad para que no se tengan que empobrecer los argentinos por culpa de los desaguisados de los economistas de mala calidad y por gobiernos de pésima y peor calaña". Las grandes mayorías ya se están arruinando, el 55 % de la población se encuentra sumergida en la pobreza y el Gobierno deposita sus esperanzas en aumentar el endeudamiento con el FMI que nos trajo hasta acá con sus programas de ajuste fiscal.
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