Hay un dato del informe de UNICEF sobre las infancias que se saltean alguna de las comidas que también es brutal. Pocos medios lo citaron: 10 millones de pibes comen menos carne y leche que hace 6 meses. También sus madres, que no toman para dejarles algo.
Los datos destruyen a Milei: en 2015 con un salario mínimo podías comprar 480 litros de leche; en 2023 te alcanzaba para 260, menos; ahora 123. Desde que asumió el consumo de leche cayó a su mínimo histórico, peor que en la hiperinflación del 90: 123 litros x habitante x año.
Está claro: estamos ante una transferencia brutal desde el estómago de los pibes y el bolsillo de sus madres, a un puñado de millonarios. Y te quiero contar quiénes son.
Los Mastellone son los históricos dueños de La Serenísima. ¿Sabés cuánto ganó este primer semestre? 56.096 millones de pesos.
Fue uno de los principales beneficiados por la derogación de la ley de abastecimiento, la ley de góndolas, la liberación total de precios y la devaluación (porque exportan).
Siempre fue gente “mala leche”. De hecho el nombre “La Serenísima” es en honor a la escuadra de aviones del poeta y militar, “Gabrielle D’Annunzio” que fue el primer fascista italiano, inspirador de Mussolini. Por eso también los colores de la bandera.
Mal que le pese al liberal Milei, la única teta que ordeñó Mastellone es la del Estado. Todos los gobiernos le hicieron favores. Incluso la dictadura que en 1982 le estatizó parte de su deuda.
No tiene campos ni vaquitas. Estafa a los productores, exprime a sus trabajadores y a las familias. Y tiene unos socios… Luis Pagani de Arcor, uno de los hombres más millonarios del país que se hizo poderoso durante la dictadura. Danone, multinacional francesa con plantas en todo el mundo. Y Dallpoint Investments, un fondo buitre con sede en Delaware (EE.UU), el paraíso fiscal más grande del mundo.
La izquierda dice: ningún pibe sin comida. Aumento de salarios y programas sociales. Y basta de especulación: hay que expropiar a toda empresa que especule con los productos de primera necesidad y ponerlas bajo administración de sus trabajadores. |