Un juez de la Corte Suprema de Brasil sancionó a X, el multimillonario sudáfricano denuncia un ataque ¿Una disputa entre la libertad de expresión y la soberanía de un país?
De esos temas habló Diego Sacchi en su columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs por Radio Con Vos.
¿Libertad de expresión o derecho soberano de un país?
El debate se abrió cuando Elon Musk decidió no acatar una resolución judicial que la justicia brasileña impuso a la red social X (ex twitter), y comenzó un enfrentamiento.
El juez del Supremo Tribunal Federal (Corte Suprema) de Brasil, Alexandre de Moraes, exigió a X que eliminará algunas cuentas bolsonaristas entre ellos un diputado. Musk se negó diciendo que eso violaba la libertad de expresión.
Eso intenta hacernos creer el propio empresario que recibió apoyó de figuras como Javier Milei o Donald Trump.
La realidad está muy lejos. Veamos algunos ejemplos.
“¡Derrocaremos a quien queramos! ¡Bánquensela!”, contestó Musk de forma provocadora en julio de 2020, cuando un usuario lo acusó de estar detrás del golpe contra el expresidente Evo Morales.
En relación a pedidos similares al del juez brasileño, en otras oportunidades Musk justificó el cumplimiento de las órdenes de censura de contenidos en países como Turquía, donde se lo vio muy cercano al líder autoritario Recep Tayyip Erdoğan, o India, donde aceptó bloquear contenidos tales como un documental de la BBC.
La realidad es que Musk, como otros dueños de multinacionales de tecnología, se manejan de acuerdo a sus intereses, vulnerando la soberanía de cada país e incluso teniendo injerencia directa en lo que pasa.
¿Un juez brasileño va a salvar la democracia y la soberanía?
Al juez Alexandre de Moraes lo presentan por estos días como un salvador de la democracia y la soberanía del país, recibiendo el apoyo del presidente Lula Da Silva.
Moraes es parte del STF que fue parte fundamental del golpe institucional contra Dilma Rousseff en 2016 y luego de la proscripción de Lula que terminó allanando el camino para el triunfo de Bolsonaro.
Moraes también rompió o no cumplió con determinados procesos legales durante la investigación por las “Fake news” según reveló la red Folha. Esta filtración se conoce como “Vaza Toga” y son filtraciones sobre cómo el juez uso el Poder Judicial de forma autoritaria.
El debate sobre lo que pasa en Brasil derivó en cierto apoyo al juez Moraes por sus medidas, como prohibir X, contra la empresa de Elon Musk.
Es verdad que no se puede permitir que empresarios como Elon Musk pasen por arriba de la soberanía de un país, pero eso no puede hacerse a costa de empoderar medidas autoritarias.
Prohibir usuarios, utilizar datos de las redes sociales para detener personas, hoy pueden ser utilizados contra la extrema derecha y mañana contra quienes protesten por sus derechos.
En estas disputas, la mayoría de la población, muchas veces afectada por medidas incluso judiciales que favorecen a los más ricos, debe encontrar la manera de defender sus intereses con sus propias fuerzas.
