Con las últimas medidas y cambios de gabinete, el gobernador de Río Negro Alberto Weretilneck, refuerza su alineación con políticas de ajuste en espejo con Milei: profundizar medidas neoliberales cada vez más enfocadas en el recorte del sector público, la persecución a trabajadores y la ampliación de beneficios a grandes empresas.
La colaboración entre Juntos Somos Río Negro y La Libertad Avanza se ha vuelto más evidente en los últimos meses. El pasado miércoles, en el Congreso Nacional, el legislador de JSRN Agustín Domingo se abstuvo en la votación por el veto a la nueva ley de movilidad jubilatoria, un posicionamiento que el propio diputado explicó como parte de un acuerdo para darle gobernabilidad al proyecto político de Milei. Este tipo de decisiones afectan directamente a los jubilados y reflejan un claro compromiso con las políticas de ajuste impulsadas a nivel nacional. En el mismo sentido lo demostró la Senadora de JSRN Mónica Silva con su voto para la aprobación de la aberrante y corrupta Ley de Bases.
En este contexto Weretilneck presentó el jueves cambios clave en su gabinete:
Fabián Gatti, abogado con una larga trayectoria política, fue designado como Secretario de Gobierno, Trabajo y Turismo. Desde la década de los 90, Gatti ha ocupado diversos cargos en el concejo deliberante de Cipolletti, la legislatura rionegrina, la jefatura de la policía provincial, y la representación del gobierno en el Banco Patagonia. Es un viejo conocido del gobernador, lo que refuerza la idea de que Weretilneck está consolidando un equipo leal y orgánico a su condición de empresario de Cipolletti para llevar adelante su agenda de ajuste.
Federico Lutz, otro colaborador de larga data, asumió como Ministro de Modernización, una cartera que puede ser clave para implementar políticas de “eficiencia” administrativa, digitalización del Estado y, en muchos casos claro está, recorte de personal.
Milton Dumrauf, por su parte, fue nombrado Secretario de Estado de Asuntos Estratégicos y Planificación. Este cargo le permitirá delinear la hoja de ruta a largo plazo del gobierno provincial, con un enfoque que probablemente priorice áreas clave para la inversión privada y relegue otras que puedan estar más vinculadas a lo social, en línea con el plan de entrega que significa el RIGI, votado nacional y provincialmente en favor de las megamineras y petroleras imperialistas.
Entre estos cambios es importante señalar la incorporación de un concejal peronista a su gestión. Es el caso de Franco Ávila como Secretario de Cultura. Esta designación responde como agradecimiento al kirchnerismo que lideró Doñate el año pasado integrando una alianza electoral con Weretilenck, en común con los radicales. Una alianza inédita de la cual el propio peronismo intenta despegarse, pero que la integración de Ávila y el apoyo simbólico del legislador Pedro Dantas, hacen imposible ocultar. El gobernador mantiene una estrategia de ampliar su base de apoyo que lo legitime y le permita asegurar estabilidad política en un contexto político nacional cada vez más polarizado. También habla de las líneas internas del peronismo provincial, en la cual el gobernador se permite seguir cooptando figuras.
Esta semana también fue protagonista un nuevo ataque a los trabajadores estatales. El gobierno implementó un régimen de control de licencias tercerizado por una empresa de la provincia de Buenos Aires. La lluvia de denuncias por trabajadores cuyas licencias se rechazaron de forma ilegal demostraron que el objetivo del nuevo sistema poco tiene que ver con "hacer más eficiente" el circuito sino recortar los pocos fondos que se destinan para cubrir los puestos laborales.
Esta ofensiva se complementa con las leyes de "Presentismo", la reforma al régimen laboral de los trabajadores judiciales y la de "Esencialidad de la Educación" que pretenden avasallar los derechos del pueblo hasta dejarnos sin posibilidad de protestar por ello. Estos recortes sumados a la entrega de bienes comunes que representa el RIGI componen la receta del gobierno rionegrino de pagar la deuda del Plan Castello al cual la provincia pagó a principios de mes la segunda cuota de 45 millones de dólares.
Hoy más que nunca el rol de los sindicatos debe ser el de herramienta de lucha para les trabajadores. Las conducciones de UnTER, ATE y UPCN deben abandonar la tregua que mantienen la CTA y la CGT con los gobiernos ajustadores. |