Esto se da luego de que el 23 de Agosto, Servado Salazar Cano, obrero de Prime Wheel, una fábrica de rines ubicada en la industriosa y fronteriza ciudad de Tijuana, desapareció tras acudir a una junta de trabajo en la planta.

Desde ese día, hace más de un mes sus familiares no tiene noticias de él y hasta el este fin de semana la empresa seguía laborando en total normalidad pese a que un trabajador suyo había desaparecido dentro de sus instalaciones

El 5 de septiembre la Fiscalía de Baja California encontró restos de sangre en un sanitario de la empresa y detuvo a otros dos empleados de la fábrica por sospechar su participación en la desaparición forzada de Servando.

No obstante, la fábrica ha entorpecido las investigaciones. De hecho, la patronal está más preocupada por que se abra el centro de trabajo a que se esclarezcan los hechos.

La familia de Servando exige también a las autoridades que den celeridad para el análisis de las pruebas. En ese sentido va también el bloqueo que realizan:

Decidimos venir porque necesitamos respuestas por parte de las autoridades, una respuesta más clara y concisa... Necesitamos la respuesta del resultado de ADN que se encontró.

La indolencia patronal en este caso como en otros -por ejemplo, el de los trabajadores muertos en la mina Pasta de Conchos- ponen de manifiesto que para la burguesía es más importante enriquecerse que la vida de trabajadoras y trabajadores, sin embargo, debemos organizarnos para que este tipo de crímenes no se sigan repitiendo. Nuestra vida vale más que sus ganancias.