Milei no reconoce un héroe ni aunque lo tenga enfrente…
Se paseó por Córdoba, donde brigadistas y guardaparques luchan contra el fuego y no fue capaz de acercarse a ver cómo estaban.
Ah pero a la casta la recibe con asado...
Gracias a la presión popular se rompió el cerco mediático y todo el país se enteró de los incendios devastadores de Córdoba. Se habla de más de 16.000 ha afectadas y ya son más de 50.000 ha quemadas en lo que va del año.
La situación es tan grave que Milei fue disfrazado a fingir “preocupación”.
Pero ni él ni el Gobernador declaran la Emergencia Nacional que es lo que están pidiendo los vecinos. Solo admitieron la declaración de “zona de desastre” en departamentos como Calamuchita y Punilla.
Las brigadas comunitarias, los trabajadores de parques nacionales y bomberos hacen lo imposible por apagar el fuego que arrasa con bosque y monte nativo y en las sierras altas amenaza importantes fuentes de agua, que es un recurso crítico.
Un bosque con especies como las que crecen en las sierras necesita al menos 30 años para recuperarse.
Algunas familias se quedaron sin nada. Pero no todos pierden con el fuego.
Ganan la minería, el agronegocio y agro-ganadería, la especulación inmobiliaria y los deportes de elite como los circuitos de motocross.
Los bosques nativos están protegidos por leyes, pero con los incendios los empresarios aprovechan para el desmonte, para cambiar los usos del suelo y habilitar negocios que están prohibidos.
A esto se suma la construcción de autovías e infraestructura pública al servicio de megaproyectos extractivistas, verdaderas rutas para el saqueo. En Punilla hay activistas ambientales procesados por protestar contra la autovía.
Los incendios comenzaron un día después de la adhesión de la provincia al RIGI, el régimen de beneficios de todo tipo para actividades extractivistas. Para eso sí hay plata, para apagar el fuego dicen que no… La motosierra sobre la Ley de bosques, sobre Manejo del fuego y los recursos que necesitan los brigadistas y bomberos terminan de completar el combo perfecto para que se prenda fuego todo.
Pero brigadas, vecinos, docentes, estudiantes y trabajadores se organizan para proteger sus territorios y vos podés ayudarlos. Compartí lo que está pasando, sumate a las jornadas de protesta y participá de las asambleas.
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