Docentes y estudiantes del ISFD N°41 respondieron al veto presidencial de Javier Milei sobre la ley de financiamiento universitario con un ruidazo y asamblea que surgió desde abajo, a la misma se sumaron y convocaron estudiantes de la Universidad Nacional Guillermo Brown.
El veto de Milei, que fue sostenido en la Cámara de Diputados por un estrecho margen de tres votos, ha generado un amplio rechazo en el ámbito universitario. La ley vetada buscaba asegurar un aumento en los salarios docentes y no docentes, ajustándolos por inflación y retroactivo a diciembre, en un contexto donde estos salarios son de los más rezagados en la administración pública
La jornada en el Instituto 41 y la Universidad Nacional Guillermo Brown no fue un hecho aislado. En todo el país, se han multiplicado las tomas de facultades y las movilizaciones, como parte de un movimiento estudiantil que se niega a aceptar el ajuste en educación y salud. Un ejemplo son los trabajadores del hospital Bonaparte que frenaron el cierre.
Las asambleas siguen demostrando que sobran fuerzas para luchar
Durante la asamblea participaron más de 150 estudiantes y docentes, la conducción del centro de estudiantes y las distintas agrupaciones de las instituciones con sede en el ex Nacional de Adrogué. Se mostró que hay fuerzas para frenar al gobierno y sus cómplices. Desde En Clave Roja se planteó que hay que profundizar el método de la asamblea y que sólo mediante la organización desde abajo, definiendo un plan de lucha en coordinación con las demás universidades y sectores en lucha, avanzando en acciones comunes y llamando a toda la comunidad educativa, invitando a los trabajadores a que se sumen a esta pelea, seremos más fuertes.¡El movimiento estudiantil se despertó!
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