El lunes 21 se llevó adelante la Asamblea Universitaria Extraordinaria, producto de la exigencia y pelea de los estudiantes y docentes a las autoridades y Consejo Superior de la UNJu.
Desde que Milei nos declaró la guerra con el veto a la Ley de Financiamiento Universitario, los estudiantes y docentes venimos organizándonos bajo la más amplia democracia en las asambleas por carrera, interclaustros e interfacultades. Gracias a eso, no solo logramos el paso de mesas de examen y el cese de actividades para la Asamblea Interfacultades, sino también que convoquen a una Asamblea Universitaria donde el rector, la vicerrectora, los decanos y los consejeros de todos los claustros (docente, egresados y egresadas, no docentes) tuvieron que dar la cara y dar respuestas con su voto, omisiones, silencios y opiniones a la lucha que venimos dando los estudiantes.
Fue una Asamblea Universitaria con mucha tensión, donde se vio a las autoridades nerviosas frente a los reclamos.
Los estudiantes de la asamblea Interclaustro de la Facultad de Humanidades nos hicimos presentes con una enmienda a la resolución n.° 168, que tomaba los reclamos presentados, pero en la que ellos agregaron la “pelea” por el presupuesto 2025. La enmienda fue rechazada por el organismo. En ella, exigimos a la asamblea universitaria pronunciarse por el aumento del presupuesto en base al no pago de intereses de la deuda al FMI, sino que sea en base a impuestos progresivos a los ricos, la quita de subsidios a grandes empresarios y no en una pelea de pobres contra pobres. O sea, que se dejara en claro de dónde saldría el dinero para financiar una mejora del presupuesto de la Universidad.
Llevamos esta propuesta, dado que Milei advirtió que, de querer más presupuesto para la universidad, se debería quitar de otras áreas de la esfera pública, ya sea salud, AUH, jubilados, obras públicas, trabajadores estatales, cultura. Así también, exigimos se convoque a una tercera marcha nacional federal y la construcción de un comedor universitario propio, con amplitud suficiente para los estudiantes inscriptos en la universidad y las becas comedor sean accesibles.
Ante la respuesta de las autoridades y de la Asamblea Universitaria, quedó en evidencia:
Primero, que aprobaron como rectificación el “declararse en contra del veto a la ley de Financiamiento Universitario” y reiteraron su “compromiso en defensa de la Universidad Pública y la exigencia de más fondos en el presupuesto 2025”, a secas, sin querer discutir de dónde saldrían los fondos.
Segundo, la Asamblea se negó a votar la enmienda presentada por los estudiantes. ¿Por qué? A este interrogante no hubo respuesta, ni por sí, ni por no. Solo explicaciones protocolares de parte del rector Mario Bonillo, tales como: “apenas mantenemos quórum, se van dos y perdemos el quórum, si tratamos esta enmienda, no podemos votar”, y “esta asamblea se convocó para tratar solamente lo expuesto en la nota presentada ante Consejo Superior”.
Ante el rechazo y la excusa de que no trataron la propuesta de los estudiantes por una cuestión técnica del reglamento, llevaremos estas propuestas al próximo Consejo Superior. Sabemos que no podemos confiar ciegamente en autoridades que ya negociaron en abril. Más allá del reglamento, el problema en el fondo es que negocian el presupuesto universitario en el presupuesto 2025, como lo dice la resolución del Consejo Superior. La Asamblea Universitaria fue, más bien, un acto para la foto. Demostraron que no quieren ningún compromiso serio de lucha. Mientras estamos en la toma, en clases públicas, en marchas y asambleas, las autoridades opinan que con una declaración resuelven todo, pero no; se equivocan.
Por eso, seguiremos convocando a estudiantes y docentes para seguir organizándonos en asambleas para debatir y tomar decisiones, como lo hicimos en la asamblea Interfacultades del martes 22 de octubre.
Y finalmente, habló el diputado Alejandro Vilca.
El diputado nacional del PTS-FITU, Alejandro Vilca, se presentó en el marco de la convocatoria “al pueblo” realizada por las autoridades para manifestar un saludo a la juventud, la docencia y a la no docencia.
A pesar de que en un principio los consejeros de la UCR y el PJ le negaron la palabra, gracias a la insistencia de docentes y estudiantes, la Asamblea tuvo que votar a favor de ceder la palabra. “Es el único representante Nacional que está acompañándonos”, se escuchaba de fondo.
Alejandro remarcó: “La defensa de la universidad pública y la movilización estudiantil son fundamentales para enfrentar el plan de ajuste de Milei. Este presupuesto es una trampa que destina recursos para pagar la deuda mientras ajusta a jubilados, trabajadores y estudiantes”.
La experiencia de la lucha contra la Reforma.
En una extensa carta, el docente universitario, Ivan Blacutt, acompañado por el secretario general de Adiunju, expresó por su causa y de los 19 acusados por haber participado de la lucha contra la reforma de Morales, que serán llevados a juicio. Por esto, la asamblea se pronunció a favor del pedido de un protocolo de la Unju para defender a docentes ante la represión. Una consejera docente recordó los 30 mil detenidos desaparecidos durante la última dictadura militar, su entrega a la causa y la lucha.
Toda esta lucha, durante la reforma, que dimos los estudiantes, docentes y comunidades originarias en conjunto, nos permite que hoy realicemos clases públicas en la calle, asambleas en la calle, movilizarnos. Por ende, la reforma quedó como un papel mojado y la pelea porque caigan las causas a nuestros docentes y todas las que se hicieron, como la del Código Contravencional, nos impulsa a redoblar la organización de las y los estudiantes desde abajo junto a los trabajadores, porque no les tenemos miedo.
Por último, desde la agrupación Ají 20, se denunció el ajuste y tarifazos que lleva adelante el gobierno de Milei.
A reforzar la lucha organizados desde abajo. Por una nueva Marcha Federal YA.
Nosotros, las y los estudiantes, somos quienes estamos impulsando los espacios para llegar cada día a más y más estudiantes. Desde la toma activa, las marchas, pasadas por cursos, asambleas. Ante las autoridades que pretenden que nos quedemos tranquilos con una resolución que exige a senadores que “voten bien” solo podemos confiar en esa fuerza organizada desde abajo, de manera independiente de las autoridades y de las agrupaciones que las apoyan, para discutir y debatir democráticamente cómo tirar todo el plan de ajuste de Milei y sus cómplices.
Las lecciones que nos dejó esa asamblea son imprescindibles. Por eso, en la asamblea Interfacultades votamos, exigir una tercera marcha nacional federal, como la de abril, donde fuimos un millón en las calles. Para no caer en la trampa del presupuesto 2025, sino pelear por los fondos para la Universidad sin afectar a los jubilados, las y los estatales, a nuestras familias trabajadoras, salud y vivienda. Esta es la mejor respuesta a quienes quieren un modelo de un país atado al FMI. Porque no somos individualistas como quiere Milei y que nos cortemos solos, ya lo dicen nuestros cantos, la universidad es de los trabajadores. |
