La lucha contra la discriminación laboral frente a quienes se organizan da nuevamente un paso adelante en el rubro de comercio. Federico Borda trabaja desde hace 18 años en el Jumbo Pilar. Fue delegado de los trabajadores durante 4 años desde 2018 a 2022 en una lista independiente, respetando la democracia de los trabajadores e impulsando asambleas.
Estas libertades democráticas, no son del agrado de Cencosud. Es por ello, que al día siguiente que finalizaron los fueros gremiales, el 27 de febrero de 2023 despidió a Borda y al otro delegado de la comisión interna, que junto al despido de Gimenez del 2024, Cencosud ilegalmente despidió a la totalidad de los ex delegados.
Cencosud posee un prontuario nefasto en relación a discriminación y prácticas antisindicales. El antecedente más representativo es el “leading case” “ALVAREZ C/CENCOSUD” de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el cual marcó tendencia en la Argentina hasta el día de la fecha en los juicios de discriminación laboral. En el caso del expediente de Borda, la sala X de la Cámara Nacional de Apelaciones en el Trabajo dispuso: “... Esta ley (Ley 23.592. Medidas contra actos discriminatorios) es plenamente aplicable a las relaciones laborales con fundamento en el art. 16 de la Constitución Nacional en cuanto a la garantía de igualdad y se revela plenamente acorde con la normativa de los derechos humanos que presentan jerarquía constitucional según la reforma de 1994 y asimismo con los convenios de la OIT (como el 98) que tienen jerarquía superior a la ley existente en el ordenamiento jurídico interno (art. 75 inciso 22 C.N.)...”.
Al respecto de este fallo, le preguntamos a los abogados del CEPRODH, quienes fueron los abogados de Borda y Gimenez y nos dijeron que: "lo interesante del fallo, es que ante los despidos discriminatorios, se puede plantear la reincorporación inclusive con la nueva Ley de Bases (ley 27.742) y su polémico art. 245 BIS la Ley de Contrato de Trabajo que establece que los empleadores pueden despedir discriminatoriamente y sólo son pasibles de una multa morigerada".
Federico Borda es parte de esta pelea, de trabajadores que pelean por sus derechos. Que ante el despido que deja a su familia sin sus ingresos, no baja los brazos. Su reinstalación es producto de una gran campaña y solidaridad de organismos de los Derechos Humanos, de muchos sectores de trabajadores de Fate, Worldcolor, Madygraf, Kraft, asambleas populares de Zona Norte, estudiantes de las universidades de la zona entre otros, demostrando que la perseverancia en la lucha y buscando la solidaridad de otros sectores son importantes para demostrar que las patronales se les puede ganar.
La reinstalación de Borda se da en un contexto donde el gobierno nacional avanza sobre los derechos de los trabajadores, criminalizando y persiguiendo a quienes reclaman y lucha. Su ingreso es un hecho importante en zona norte, y en el rubro de Comercio, donde las reinstalaciones no son habituales.
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