Este bono, promulgado en medio de la profunda crisis económica que afecta a las y los trabajadores del país, se da en un contexto en el que los policías fueron rebasados en varias ocasiones al intentar desmovilizar las medidas de protesta, y en el que al menos 60 uniformados resultaron heridos hasta la fecha.
Desde La Izquierda Diario, defendemos el derecho a la protesta y nos oponemos tajantemente al accionar represivo de la policía. Esta medida del gobierno de Arce legítima y fomenta el uso de la violencia contra las movilizaciones populares en Cochabamba. Si la policía se encuentra expuesta a “situaciones de peligro”, es a consecuencia de su accionar violento y represor. Nos diferenciamos del trasfondo político de las movilizaciones, pero defendemos a rajatabla el derecho legítimo a la protesta.
Resulta mucho más urgente encontrar soluciones a los problemas de desabastecimiento y escasez de combustibles que fomentar y financiar el uso de la violencia estatal. La policía se beneficia de privilegios ajenos al resto de la clase trabajadora en el país: recibe dotación de víveres dos veces al año, todos los derechos laborales y un sueldo fijo. Mientras el 80% de la población boliviana genera recursos desde una situación de informalidad y precarización laboral, la policía resulta ser un sector privilegiado.
A diferencia de varios sectores de la izquierda que proclaman que los policías son también trabajadores, nosotros establecemos una diferenciación clave. Pese a estar en condiciones de subordinación, la policía tiene como función hacer respetar la propiedad privada y los intereses de la burguesía. En ese sentido nos declaramos en contra de cualquier aparato de represión al servicio de la burguesía y de la institucionalización de bonos que no hace más que fortalecer una institución que está al servicio de reprimir al pueblo trabajador mientras protege los negocios de los que lucran con la crisis.
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