Desde Contracorriente y Pan y Rosas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza nos presentamos a la Junta de Facultad, obteniendo cuatro representantes con una candidatura abiertamente anticapitalista.
Estas elecciones tienen lugar mientras aumenta el presupuesto militar más grande de las últimas décadas, la crisis de la vivienda, del genocidio en Palestina y de la catástrofe climática de la DANA. Todo ello es parte del discurso que llevamos a las aulas, denunciando que UNIZAR es la universidad que presume de tener mayor colaboración con el ejército, así como con las multinacionales más contaminantes, que desahucian familias de sus casas y que se llenan los bolsillos con la industria de guerra.
No confiamos en que nos regale pequeñas migajas la burocracia universitaria y su régimen antidemocrático. Año tras año se convoca a miles de estudiantes para elegir los distintos órganos de “representación” y gobierno de la Universidad: juntas de facultad, claustro, rectorado, etc. La historia es siempre la misma: una participación estudiantil bajísima. Además, en todos estos órganos la representación que tenemos como estudiantes es minoritaria, a pesar de que somos la grandísima mayoría, sin ninguna capacidad real para intervenir en la toma de decisiones.
Por eso presentamos esta candidatura como una forma de seguir denunciando esta falta de democracia en la universidad, pero sobre todo cuestionamos la universidad neoliberal en su conjunto. Que no te engañen, las decisiones reales no las toman en Junta de Facultad o Claustro los representantes. Las decisiones se toman en los Consejos Sociales donde la casta universitaria de rectores y decanos se reúnen con los políticos del régimen y con directivos y representantes de organizaciones empresariales.
Nuestra participación en las elecciones no es un fin en sí mismo, sino que tiene el objetivo de expresar una impugnación a la universidad de la casta y las empresas y ponerse al servicio de levantar un gran movimiento estudiantil. Para usar estas posiciones como altavoz de la pelea fundamental que tiene que dar la juventud contra el modelo de producción capitalista generador del cambio climático, contra el rearme, la crisis de vivienda, el genocidio en Gaza, el imperialismo, la extrema derecha, la precariedad.
¿Por qué luchamos en la Universidad de Zaragoza?
Universidad gratuita, de calidad y universal. Financiada con impuestos a las grandes
fortunas y empresas. Para todos los estudiantes, incluyendo los y las migrantes. Becassalario para los estudiantes de rentas bajas. Expropiación de los Colegios Mayores en
manos de órdenes religiosas y organizaciones privadas y puestos a disposición de las
necesidades habitacionales de los y las estudiantes.
Contra la LGTBIfobia, el machismo y el acoso. Basta de impunidad y protección a
catedráticos y altos cargos. Por la constitución de comisiones de mujeres y disidencias
sexuales y de género, independientes de la casta universitaria, para abordar los casos
de machismo y lgtbifobia y dar respuestas adecuadas desde una perspectiva de
transformación social y restaurativa.
Universidad al servicio de la reconstrucción y apoyo a las afectadas de la DANA.
Ayudas y permisos para estudiantes cuyas familias hayan sido afectadas. Donaciones
de material y recursos para la reconstrucción. Organización de brigadas de voluntarios
con permisos para docentes, trabajadores y estudiantes. Prácticas convalidables en las
tareas de limpieza, reconstrucción y asistencia en carreras como arquitectura,
geografía, piscología, etc.
Contra el genocidio en Palestina, el rearme imperialista y el discurso militarista.
Ruptura de todos los acuerdos con el Ejército y con empresas que invierten en
armamento y financian el genocidio palestino, empezando por el BBVA y el Santander.
Ruptura de todos los acuerdos con universidades e instituciones israelíes. Programas
de solidaridad y acogida a estudiantes refugiados palestinos.
Acabemos con el antidemocrático régimen de la casta universitaria y las grandes
empresas. ¡Fuera empresarios de los órganos de decisión! Abolición de los mal
llamados Consejos Sociales. Abolición de la figura monárquica del rector. Contra los
privilegios de la casta de catedráticos. Por una universidad dirigida por sus estudiantes,
docentes y trabajadores con representación acorde a su peso en la comunidad
universitaria. Derechos de representación de los y las trabajadoras de servicios
externalizados (cafeterías, limpieza, etc.) actualmente apartados.
Por una universidad al servicio de las necesidades del pueblo trabajador. La casta,
las empresas, el ejército han puesto a la universidad a favorecer el desarrollo militar y a
garantizar beneficios privados a costa del planeta y las personas. Las universidades se
encuentran totalmente alejadas de las necesidades de la mayoría social trabajadora. Es
hora de cambiar las prioridades y poner la inteligencia colectiva a resolver los grandes
problemas: el cambio climático, el problema de la vivienda, la conflictividad
internacional, el avance de ideas reaccionarias, la opresión y explotación, etc. Luchemos
por una universidad al servicio de la transformación social para, como decían los
estudiantes de mayo del 68, pasar de la crítica de la universidad de clases a la crítica de
la sociedad de clases.
Conócenos:
Twitter: @Contrac_Zgz
Instagram: @contracorriente_zgz |