Las familias de cientos de personas que permanecen injustamente privadas de libertad post 28J, expresan su profunda preocupación y condenan enérgicamente los actos de maltrato y violencia física y psicológica perpetrados por un grupo de custodios contra personas privadas de libertad en el Centro Penitenciario de Tocorón.

Según testimonios de los propios familiares, varios de los presos han sido víctimas de agresiones, humillaciones y tratos crueles e inhumanos por parte de algunos funcionarios encargados de su custodia. Estos hechos atentan contra la dignidad humana y violan los más elementales derechos humanos, por eso los familiares declaran que esta situación “ha generado un clima de temor y desprotección entre la población penitenciaria”.

“Nos hemos dado cuenta que los castigos se están volviendo más severos… hay custodios que golpean a los muchachos en la cabeza y en el cuello fuerte por solo levantar la voz o mirarles feo… Sé que a mi hijo lo han golpeado muchísimo”, declara un padre de uno de los jóvenes detenidos. “Espero que no ocurra una desgracia para que reaccionemos, pero no crean que aquí el problema es de si reciben o no palo, los están matando poco a poco de otras formas”, enfatiza.

Es importante recordar que estas personas, permanecen injustamente privadas de libertad tras los acontecimientos ocurridos en las protestas postelectorales del 29 de julio en diferentes partes del país, la mayoría de ellos sin pruebas en su contra. Los familiares enfatizan que “aunque se encuentran privadas de libertad, se les debe preservar sus derechos fundamentales, tal como lo establecen la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y los tratados internacionales suscritos por el país”. El uso de la fuerza, la tortura y cualquier forma de maltrato son prácticas inadmisibles que deben ser condenadas, investigadas y sancionadas.

Ante esta situación, los familiares exigen, “investigar de manera inmediata y exhaustiva estos hechos, identificando a los responsables y asegurando que se apliquen las sanciones correspondientes”, así como “dar continuidad a los procesos de excarcelaciones, que le permita a todos volver a sus hogares”. Al mismo tiempo hacen “un llamado a las organizaciones de derechos humanos y políticas, a los medios de comunicación a sumarse a esta denuncia y a exigir justicia e inmediata libertad”.

Movimientos sociales, organismos de derechos humanos, organizaciones políticas, sindicales y activistas siguen reclamando: ¡No más maltrato! ¡No más impunidad! ¡Basta de represión! ¡Libertad para todos!