Foto: Enlaces Bolivia
La marcha de personas con discapacidad que partió el pasado 22 de marzo desde la ciudad de Cochabamba rumbo a La Paz, para exigir el aumento de su bono de 1000 bs anuales a 500 bs mensuales, se encuentra cada vez más cerca de la sede de gobierno de Bolivia, a pesar de las trabas, las acusaciones de parte de la Ministra de Justicia y del amedrentamiento sufrido.
Mientras la marcha sigue en su camino a La Paz con algunas inevitables bajas (se reportaron siete bajas de movilizados que fueron afectados por la altura y las bajas temperaturas), la Ministra de Justicia, Virginia Velasco, emitió polémicas acusaciones contra este sector. Afirmó que el sector recibía un pago de 100 dólares diarios por parte de una Organización No Gubernamental (ONG) norteamericana para que puedan marchar hacia La Paz, según el reporte de radio Pío XII de la red ERBOL, además de declarar el pasado miércoles 30 de Marzo que de 55 mil personas con discapacidades registradas en el país, sólo 55 personas protagonizan dicha marcha, lo que, según ella, denotaría una división interna que genera malestar en el resto de las federaciones. Con esta excusa es que el gobierno sigue tratando de pactar con algunos sectores al margen de los marchistas que continúan la movilización.
El dirigente de los marchistas, Diego Cayo, respondió lo siguiente a raíz de dichas acusaciones “Señora ministra, si usted tiene pruebas de que me pagan o que a todos nos pagan al día, que venga y lo demuestre y si tengo que ir a la cárcel, pues voy. Estoy dispuesto a dar mi vida señora Ministra, basta de mentiras, basta de guerra sucia. Queremos vivir con dignidad, queremos tener inclusión”. Por otro lado el dirigente de las personas con discapacidad de Chuquisaca, Alex Vásquez, señaló que la caravana no es impulsada por opositores y, además, refutó las declaraciones de la ministra Velasco asegurando que no existe división en el sector y que no son sólo 55 personas, es más, dijo, que se sumarán otras 70 personas en próximos días. Se conoció también que seis personas con discapacidad llegaron de Pando y se sumarán a la caravana.
El presidente Evo Morales, por su parte, ya se manifestó ante la petición de los marchistas y afirmó que el pago de un bono de mensual de 500 bolivianos es “imposible” de atender, porque es prioridad la economía nacional, gran contradicción cuando se utiliza como bandera la supuesta “bonanza económica” en que se encuentra el país a raíz de una “buena gestión” de este gobierno.
La indignación crece no solo en los marchistas, sino en la población que se ha solidarizado con esta lucha y el gran esfuerzo que vienen realizando recorriendo cientos de kilómetros en sillas de ruedas y con muletas. Después de haber gastado millones de dólares en la campaña para el referéndum pasado, no se entiende cómo es posible que se rechace tan contundentemente la petición de las personas con discapacidad, sin contar el amplio presupuesto que hay para otros sectores, como el de los militares y los aparatos represivos.
Además de que se realiza una campaña sucia contra ellos que incluyó violencia física ya que una de las mujeres que es parte de la caravana relató este 30 de marzo, que un grupo de campesinos agredió a la dueña de un inmueble, identificada como Justita Aspete, porque ofreció refugio en un canchón a varias de las personas con discapacidad durante la noche. La mujer fue golpeada, aparentemente por órdenes de dirigentes campesinos, y hasta la amenazaron con revertir el lote en el que vive. La defensoría del pueblo no hizo más que manifestarse pidiendo atender a las personas con discapacidad. |
