En la tarde de este jueves, la expresidenta Cristina Fernández recibió a los integrantes del bloque del FpV dentro de la cámara alta. No estuvieron todos, pero eso ya se sabía de antemano. Miguel Pichetto, jefe del bloque, ya había avisado que no estaría en la reunión.
A diferencia de anteriores encuentros, en este caso Cristina se sentó a la misma mesa con los senadores. Allí se pronunció a favor de la ley de emergencia ocupacional y habló contra de los pliegos de los dos candidatos a la Corte Suprema propuestos por el macrismo: Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz.
Vale señalar que cuando CFK fue presidenta y el FpV tuvo mayoría en ambas cámaras nunca apoyó el proyecto que presentara Nicolás del Caño (PTS-FIT) para frenar despidos y suspensiones, cuestiones que ya en ese entonces sucedían en el país.
Según señala la Agencia DyN “la ex jefe de Estado intentó otra vez mostrarse como prenda de unidad del peronismo y con la idea de marcar un claro perfil opositor al gobierno de Mauricio Macri”.
Según lo que algunos asistentes informaron a la misma agencia de noticias, la ex mandataria habría reconocido en el cónclave que el nuevo escenario político tiene al peronismo y a sus bloques parlamentarios en una etapa donde la toma de decisiones se realiza de manera más horizontal.
En coincidencia con lo que ya es parte del perfil político del “Frente Ciudadano”, la expresidenta mostró un perfil conciliador donde quienes votaron a favor del acuerdo con los fondos buitre junto al macrismo, no deberían ser hostigados.
Al mismo tiempo, y en consonancia con las cuestiones que deben poner en discusión la cámara alta, la ex mandataria se pronunció contra la aprobación de los pliegos de los juristas Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz. Lo definió a partir de considerar que tienen “un vicio de origen” por haberse mostrado dispuestos a aceptar una designación en comisión en la Corta Suprema.
Aunque se pronunció a favor de la ampliación de los integrantes de la Corte y la creación de cámaras especializadas, lo que permite equilibrar el poder de los jueces.
Entre los asistentes estuvieron los bonaerenses Juan Manuel Abal Medina y María Laura Leguizamón; los correntinos Ana Almirón y Carlos Espínola; la catamarqueña Inés Blas; la chaqueña María Pilatti de Vergara; el chubutense Mario Pais; la entrerriana Sigrid Kunath; la jujeña Liliana Fellner; las riojanas Hilda Aguirre y Teresita Luna; la mendocina Anabel Fernández Sagasti; los misioneros Sandra Giménez y Juan Manuel Irrazábal; el neuquino Marcelo Fuentes; la rionegrina Silvina García Larraburu; los sanjuaninos Marina Riofrío y Ruperto Godoy; las santacruceñas Virginia García y María Ester Labado; el puntano Daniel Pérsico y la santafesina María de los Angeles Sacnún.
La reunión duró alrededor de tres horas. La ausencia de Miguel Pichetto, titular del bloque, fue uno de los temas del cónclave. Aunque todos los presentes que dieron su versión a los medios coincidieron en señalar que no se había cuestionado esa conducción.
Así, Cristina Fernández dio un paso más en los caminos que indican la construcción del llamado “Frente Ciudadano”. Está por verse qué consecuencias tendrá esto en la cámara alta. | 
