Foto: Protesta de trabajadores en Gimnasia, archivo del sitio http://infoblancosobrenegro.com/
Si bien el sindicato no especificó la forma en la que se llevará a cabo la medida de protesta, informó que debido al desconcierto en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) se dejaron de pagar sueldos de los empleados en estos tres clubes.
Lejos de terminarse los desmanejos en la AFA, la sucesión de Grondona dejó en claro que el problema no era sólo su figura, sino el sistema de la organización institucional. La actual crisis de conducción no cambió en nada la forma: arreglos sin consultas a los socios (verdaderos dueños de los clubes), contratos pocos claros y constante improvisación.
En medio de este caos, seguirán las reuniones para crear la Superliga dentro de la AFA, situación que no conforma a los clubes del ascenso, por lo que el panorama, a un día de su realización, sigue siendo incierto. Los clubes que impulsan la Superliga pretenden modificar el estatuto de la AFA para manejar de forma independiente el dinero de las televisaciones, a pesar de la advertencia de la FIFA. De este modo pretenden que reciban más plata aquellos que tengan mayor rating y cantidad de socios, beneficiando claramente a los denominados “grandes”.
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En Quilmes, de cara a la pretemporada, el manager Andreuchi declaró que el club está fundido y que están armando el equipo con lo que tienen. En el caso de Gimnasia, los jugadores vienen entrenando en simple turno, aunque a partir del reciente compromiso de los dirigentes empezarían a entrenar en doble turno.
Las medidas de fuerzas anunciadas en medio de esta disputa dentro de los clubes y dirección de la AFA afecta no sólo a los futbolistas profesionales que cobran un salario muy alto, sino a todos los juveniles con contratos bajos, porteros, cobradores, administrativos, cancheros y demás laburantes que viven su vida cotidiana en una situación complicada del país, quienes no alcanzan a pagar los alquileres y suba de tarifas.
El gremio que representa a los trabajadores de las entidades deportivas se vio obligado a dar respuesta ante la abultada deuda que llega, en algunos casos, a tres meses de atraso. |