LID: ¿Qué opinión le merecen estas jornadas?
De las jornadas he participado activamente. Hay que aprender de la historia, evaluar las cosas que hemos vivido. La intervención de la universidad fue algo que golpeó mucho a la sociedad argentina y en particular a la comunidad universitaria.
LID: ¿Con qué recuerdo te quedarías de esa fecha?
La manifestación del concejo superior fue mucho antes de la intervención. Fue cuando se produjo el golpe. La universidad se pronunció, no defendiéndose o tratando de no ser intervenida sino que fue evaluando negativamente la desestabilización y el golpe de Onganía. Luego de un mes de interregno, el 29, sin que hubiera ningún tipo de provocación de por medio ocurre la intervención.
Creo que fundamentalmente apuntó a domesticar y callar las eventuales protestas antes de que se produjeran. No había habido ningún tipo de enfrentamiento directo y tampoco el movimiento estudiantil ni la universidad tenían capacidad de enfrentar al golpe.
Pese a esto, con posterioridad, el régimen de Onganía enfrentó el Cordobazo, el rosariazo. Cuando las fuerzas populares se manifiestan espontáneamente o con algún grado de organización producen hechos históricos como estos casos y que finalmente terminaron debilitando el poder militar y llevaron al reemplazo de Onganía y los sucesivos líderes militares. |