Durante un acto en Brescia, el secretario de la ultraderechista Liga Norte, Matteo Salvini, se vistió con el uniforme de la policía y pronunció un discurso abiertamente xenófobo y antiinmigrante.

Matteo Salvini, líder de la formación de extrema derecha italiana Liga Norte, pronunció un discurso cargado de xenofobia durante la celebración de la fiesta de Ferroagosto en Ponte de Legno, Brescia. Salvini se dirigió a sus seguidores diciendo que "cuando lleguemos al gobierno la policía y los carabineros tendrán las manos libres para limpiar la ciudad". A renglón seguido agregó que se está viviendo una situación en la que la policía actúa al revés, y está “organizada, gestionada y pagada para explotar a los italianos”, y se refirió a quienes continúan abriéndole las puertas a los extranjeros como “personas sin carácter, sin espinas”.

Luego continuó: "Le propongo a todos los funcionarios de la Liga que vayamos a recuperar un albergue en cada región para restituirlo a los italianos con dificultades (...) Tomamos un camión, lo cargamos y lo dejamos en medio del bosque a 200 kilómetros, cosa que cueste un poco volver", en clara alusión de incitar a sus militantes a realizar acciones contra los centros de refugiados e inmigrantes.

Con estas palabras, plagadas de xenofobia, cinismo y reacción, Salvini volvía a incitar a sus simpatizantes. Para darle un tono aún más provocador a sus declaraciones, se vistió con el uniforme de la policía. Este discurso generó polémicas y hasta el sindicato de policías de Génova se tuvo que diferenciar, tildando el discurso de gravísimo.

Estas declaraciones no sorprenden a quienes conocen de la historia de la Liga Norte y los discursos de Salvini, pero sirven para ilustrar parte de la vida política de Italia, donde la extrema derecha busca posicionarse como actor político de peso. El momento italiano se encuentra cruzado por el debate en torno al Referéndum Constitucional impulsado por Renzi que marcará la agenda política de los próximos meses, y cuyas bases económicas son preocupantes con crisis financiera y bancaria, y donde días atrás se dieron a conocer índices fríos en la economía con un crecimiento del 0% en el Producto Bruto Interno entre abril y julio, la caída en los índices de la industria de 1% en un año, y un freno a la exportación.