La dislexia es un trastorno en el aprendizaje de la lectoescritura, que se da en niños que no presentan ninguna desventaja física, psíquica ni sociocultural. Su origen parece derivar de una alteración en el neurodesarrollo, que son los mecanismos a través de los cuales se organiza el Sistema Nervioso como un sistema de relación para responder a las demandas del medio ambiente en el que interactúa.
El principal problema que tiene el niño con dislexia, es en la escuela, ya que en nuestro sistema educativo todos los aprendizajes se realizan a través de la escritura, por lo cual un niño con dislexia no puede asimilar ciertos contenidos de algunas materias, como lengua y ciencias sociales, naturales, etc., porque no es capaz de interpretar su significado a través de la lectura.
Que un niño tenga dislexia, significa mucho más que dificultades en la lectura y en la escritura, ya que además existen problemas de comprensión, de memoria a corto plazo, dificultades en las nociones espacio-temporales, etc. La dislexia se presenta de distintas maneras en cada niño, cada caso es único, y no todos presentan, necesariamente, la totalidad de los síntomas.
Los modelos pedagógicos que parecen favorecer más a los niños con dislexia, son los modelos constructivistas, donde el proceso de enseñanza se comprende y se lleva a cabo como un proceso dinámico, participativo e interactivo, de modo que el conocimiento sea una auténtica construcción operada por la persona que aprende.
Otro método propicio para niños con dislexia es el Montessori, que se caracteriza por proveer un ambiente preparado, ordenado, estético, simple, real, donde cada elemento tiene su razón de ser en el desarrollo de los niños. Los materiales están diseñados para que el niño pueda reconocer el error por sí mismo y hacerse responsable del propio aprendizaje. El adulto es un observador y un guía; ayuda y estimula al niño en todos sus esfuerzos.
En nuestra capital existe un colegio con la metodología Montessori y otras escuelas que integran a los niños con dificultades, dentro de un modelo constructivista, como las municipales y algunos colegios privados. |
