En la asamblea provincial del pasado lunes, la conducción de la Lista Celeste llamó a un paro contra el ajuste de Schiaretti a los jubilados (para el 23, cuando tal vez sea tarde) y a una movilización de cuerpos orgánicos contra los tarifazos de Macri el 16, sin movilizar demasiado. Discurso "duro" y acciones diplomáticas contra el gobierno. Una buena muestra de cómo resiste el kirchnerismo en los sindicatos el brutal avance de Macri con ajustes y tarifazos. Hablan de dar una batalla que tiene tiempos más lentos, repitiendo el mantra de que “los docentes votaron a Macri”. Monserrat llamó a los delegados a no despegarse de la base: si el compañero no hace paro porque no puede sostener la medida, eso no lo convierte en reaccionario. Mientras le bendice los descuentos, lo compadece. Es indignante!!!
Consideraron también que las medidas votadas en la asamblea provincial anterior sin consultar a las bases fueron un éxito. Monserrat se mostró satisfecho con el paro nacional de CTERA y muy contento por la Marcha Federal, y felicitó especialmente al MST por marchar ese día sin críticas junto a la UEPC. Tal vez por tanto “éxito” en medidas inconsultas, se tomaron un mes desde las asambleas en las escuelas hasta esta asamblea provincial.
La Naranja y la Celeste proponen lo mismo… ¿hay feeling ahí?
Ese proyecto de burocratizar aún más la UEPC fue sancionado nuevamente en esta asamblea. Simplemente, no se votó fecha para asambleas escolares y se mandató a la conducción a convocarlas cuando así lo desee. Esta propuesta contó con el apoyo de la mayoría de los votos de la Lista Pluricolor. La continuidad de las medidas de lucha está en manos de la conducción, que se negó explícitamente a poner fecha siquiera a la próxima asamblea provincial. La Pluricolor, como lista, no puede quejarse que no haya asambleas en las escuelas cuando 14 de sus 20 delegados votan con Monserrat en ese sentido.
Por otro lado, los referentes de las Listas Celeste y Naranja propusieron lanzar una campaña contra el gobierno provincial para “disputar sentidos”, buscar maneras “inteligentes” de pelear sin exponerse a los descuentos y desgastar al gobierno. Por ejemplo, escrachar a Schiaretti en los actos de gobierno, pero siempre de manera respetuosa, con carteles que digan: “Señor gobernador: si tiene palabra, cumpla su compromiso y reabra la paritaria”. Los afiches que imprimieron al día siguiente tienen ese contenido. Imaginamos lo mucho que este tipo de acciones molestarían al gobernador.
La votación
La Celeste había conseguido que en la mayoría de los departamentos se apruebe un paro sin fecha, aunque en la asamblea de Capital, la más numerosa, se había votado parar el 16 de septiembre. La única lista que puso a consideración de la asamblea ese mandato con su plan de lucha y con todas sus reivindicaciones fue la Fucsia. Pusimos a consideración de la asamblea además que la reapertura de paritarias tenga como referencia un aumento no menor al 25 % al básico, movilizar el 16 contra el ajuste a los activos y a los pasivos y contra los tarifazos del gobierno de Macri. Agregamos la exigencia de que continúen los programas socioeducativos y se pase a planta a los compañeros que trabajan en ellos, y la necesidad de más cargos bajo convenio en las escuelas como gabinetes psicopedagógicos, porteros y trabajadores sociales.
La Celeste propuso una segunda moción, cuyo plan de lucha fue: jornada de protesta el 15, movilización de cuerpos orgánicos contra el tarifazo el 16 y paro provincial con la coordinadora de gremios aportantes a la Caja de Jubilaciones el 23. Plantearon que esperarán a la reunión Confederal de la CGT unificada, que es el 23 de septiembre, para pensar en un paro nacional. Entre las demandas de este plan de lucha está “el respeto irrestricto al Régimen Jubilatorio Docente”, algo que es parte del doble juego de Monserrat. Pone en pie una Coordinadora de gremios aportantes a la Caja de Jubilaciones para fortalecerse mientras negocia por su cuenta una armonización de las jubilaciones con el régimen nacional docente.
Los delegados departamentales de Capital de la Pluricolor no quisieron votar la fecha de paro que planteó la Celeste porque no era lo que salió en la asamblea de Capital, pero tampoco quisieron votar el mandato de Capital ni la moción que lo defendía propuesta por la Fucsia. Emiliano Martínez (de la Naranja en la Pluricolor) mocionó votar todas las reivindicaciones políticas de la moción de la Celeste (que no son las que salieron de la asamblea de Capital, y que acompaña a Monserrat en su doble juego para entregar las jubilaciones) y un plan de lucha con paro el 16 y sólo un día de asamblea, en lugar de los tres días que se habían votado en la asamblea de Capital.
Como vemos, mientras la Fucsia levanta todo el programa de la discusión en las escuelas, la Pluricolor vota la política de la Celeste. | 
