“Eso sería generar más violencia y ya estamos cansados de tanta violencia. La verdad es que con esa misma vara no quiero”, fueron las palabras de Ortiz. Ella fue quién recibió la noticia de lo sucedido en las primeras horas del domingo en el Barrio Trapiche. Su nieto de 8 años, luego de pasar horas escondido en el baúl de un auto, la llamó para avisarle que en su casa habían asesinado a su familia.
“No se puede estar pagando ojo por ojo, diente por diente” dijo la mamá de Claudia y pidió justicia por el triple femicidio que conmocionó a la provincia.
Ayer, familiares y amigos de las tres mujeres, las despidieron en una ceremonia íntima. Con inmenso dolor, la caravana fúnebre manifestó nuevamente su reclamo de justicia y por Ni Una Menos al gobierno, pasando por la casa del gobernador Alfredo Cornejo. |