Pese al fuerte calor estival y el inicio de las vacaciones, la mesa de debate que abrió el acto tuvo lugar en un salón repleto con 200 personas llegadas de París y sus barrios periféricos. La presentación estuvo repleta de saludos de sectores en lucha. Assa Traoré [hermana del joven Adama Traoré, asesinado por la policía francesa] tomó la palabra en primer lugar para repasar la situación de los barrios donde se sufre la persecución de la policía y el Estado, y denunció lo que significa esta violencia sistemática para los jóvenes.
También recordó el rol jugado por Révolution Permanente: “al lado de nuestra familia reclamando verdad y justicia para Adama y la liberación de mis hermanos y de quienes están en prisión”. Finalmente informó con emoción de los resultados del peritaje que acaba de confirmar lo que ya se sabía, pese a las mentiras del Estado: Adama no murió de un ataque cardíaco, sino de asfixia en una detención policial sin razón en Beaumont-sur-Oise.
Vincent Duse, de la CGT PSA Mulhouse [Peugeot], y Ghislaine Thormos, de la CGT PSA Poissy, recorrieron la situación del sector automotriz, donde los trabajadores padecen el aumento de velocidad de las cadenas de montaje y el agravamiento de la precariedad, que lleva a auténticos crímenes patronales como los burn-outs y los suicidios, mientras la represión antisindical se extiende más que nunca en las fábricas.
Gigi, autora de El salario de la vida, obra que recopila los cuatro meses de huelga contra el cierre de PSA Aulnay, insistió en que la realidad de las fábricas es “cierra la boca y marcha al paso de quien manda”. Señaló que ese es el camino opuesto al que hay que escoger y explicó como pudo encontrar en Révolution Permanente una forma de continuidad en las luchas.
Loïc Canitrot, trabajador del espectáculo y miembro de la Compañía Jolie Môme transmitió los saludos de toda la compañía y contó su caso: el joven es perseguido por la MEDEF [la Asociación patronal francesa] por una acción de ocupación. Su caso combina represión antisindical y el acoso a los jóvenes de los barrios periféricos.
En el Teatro de la Belle Etoile, en Saint-Denis, el cuartel general de la compañía, los trabajadores del espectáculo y los vecinos del barrio están decididos a enfrentar esta violencia que se cierne particularmente contra en la banlieue. Remarcando la necesidad “de impulsar las luchas como la mejor forma de solidaridad con quienes sufren persecución”, sumó el saludo a Jean-Marc Rouillan, “actualmente acusado y condenado por delito de opinión”.
Foued, de la CGT Campanile, que viene de una lucha victoriosa de las trabajadoras de limpieza, describió las condiciones de superexplotación que viven día a día las trabajadoras de la hostelería, blanco de múltiples vejaciones y discriminaciones. “Los patrones son unos negreros, pero hemos ganado”. Consciente de lo que espera a los trabajadores con “el golpe que es esta Reforma Laboral, hecha para ser un negocio de la patronal”, lanzó una llamada a la movilización.
“Revolución Permanente, ¿cuándo y cómo?” replicaba Anasse, ferroviario maquinista en Boruget y delegado de Sud Rail, a Vincent Duse. “Está la convocatoria del Frente Social [una movilización convocada por varias organizaciones sindicales y políticas] el 14 de julio, donde tenemos que participar y después el 12 de septiembre. Pero ¿cómo hacer para que al día siguiente continúe? No es Martínez [dirigente de la CGT] quien lo va a hacer. Tenemos que tomar la sartén por el mango para imponer un auténtico plan de lucha. Hasta hace poco, yo pensaba que un político era alguien atado a un maletín y una corbata. Pero nosotros también debemos hacer política. Nuestra historia es la de la calle y las movilizaciones.”
Daniela Cobet, de la dirección del NPA y la redacción de Revolución Permanente, rememoró las diversas campañas lanzadas por este medio digital desde su creación, hace dos años, para dar la palabra a los explotados y oprimidos, que Macron y sus medios quieren borrar de la geografía política e ideológica. Un esfuerzo que tiene el objetivo de que los adelantos tecnológicos puedan ser utilizados para amplificar la voz de las luchas y la extrema izquierda. Para terminar, subrayó cómo todo este proyecto está indisolublemente ligado a la voluntad de construir una organización: “ese partido de esclavos insurrectos del que hablaba Lenin hace cien años”.
Las intervenciones y saludos se multiplicaron: Yann Augras y Franck Cariat, de la CGT de GM&S en lucha; Alain Leclercq, maquinista de Lille y delegado de Sud Rail y Mathieu, maquinista de Estrasburgo, represaliados por hacer huelga; Ansoumane, de MC Syncro Chanteloup-les-Vignes, subcontrata de PSA Poissy, donde se desarrolló una dura lucha el pasado invierno por la contratación de interinos, Reynald Kubecki, de la CGT Sidel Le Havre y Mathias Dupuis, de la CGT Dieppe.
El acto culminó con dos conciertos, de Zapatriotes y de Sahel Ménilmontant, para bailar al ritmo de nuestras luchas y nuestros sueños, por un mundo liberado de opresión y explotación.
Todas y todos remarcaron, a lo largo de las intervenciones, desde la tribuna o la sala, la importancia de que un medio como Revolution Permanente de voz a las luchas. Para que “les otorgue continuidad”, como dijo Gigi Thormos, “para ayudar de cara a la próxima huelga”, como subrayaba Foued, y “para organizar a nuestra clase”, como concluía Vincent Duse.
Fue un gran acto para seguir las luchas, por la unidad entre la juventud y los trabajadores, tanto en Francia como en el resto del mundo, para construir una izquierda comunista y revolucionaria, a la altura de los combates que están por venir.
Traducción: Jorge Remacha |