Después de una larga jornada que comenzó temprano en la mañana con un corte del PTS y el sindicalismo combativo en Callao y Corrientes, así como acciones de lucha en todo el país, y que siguió por la tarde con una gran marcha al Congreso Nacional que fue respondida con represión por parte del Gobierno nacional y la Gendarmería Nacional responsable de la muerte de Santiago Maldonado, el oficialismo fracasó en realizar la sesión que buscaba aprobar el saqueo a los jubilados.
Nicolás del Caño presente en la movilización denunció en las redes sociales:
Como estaba anunciado, a las 14 el oficialismo comenzó el intento de sesionar con quórum, y el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, anunció haberlo conseguido pasado un tiempo, lo cual fue seriamente puesto en duda desde la oposición.
Diputados opositores reclamaron durante todo el día que se levantara una sesión polémica, que se había adelantado una semana para intentar evitar el repudio y en el marco de un centro porteño completamente militarizado. Todo con el único objetivo de saquear a los jubilados para pagar deuda y beneficiar a los empresarios.
Dos diputados, Matías Rodríguez y Mayra Mendoza, fueron heridos en los incidentes que tuvieron lugar afuera del Congreso.
Myriam Bregman repudió la represión en su cuenta oficial de twitter:
Cuando Monzó dijo que había qoúrum, hubo incidentes dentro del recinto, y minutos después Elisa Carrió, en nombre del interbloque Cambiemos, pidió el levantamiento de la sesión, lo cual tuvo lugar de inmediato. Cínicamente, Carrió acusó al clima de violencia, una manera de intentar disimular que la crisis de Cambiemos que no tuvo quórum y que la violencia fue brutalmente desplegada desde las fuerzas de seguridad, no desde los manifestantes.
El levantamiento de la sesión es un triunfo de la movilización popular y expresión del inmenso repudio a la reforma del Gobierno. Es necesario un plan de lucha para lograr el rechazo de todas las reformas, los tarifazos y los despidos. | 
