Esta mañana, ad portas de la segunda asamblea programática del CDP bajo la administración de Mario Aguilar (PH -Frente Amplio), Gajardo sale a responder por la querella contra la que fue su administración, por estafa y un monto defraudado, que llega a los $3.200 millones

En dicha conferencia de prensa, Gajardo desestimó fundamentos para llevarla a cabo y declaraba que de ser así, la querella debía ir contra su persona.

En entrevistas anteriores, Mario Aguilar refiere que él formaba parte del directorio anterior y "sabía que había una situación económica compleja, pero no supuse que era tanto". Afirma que luego de la auditoría externa que contrataron evidenciaron "balances maquillados" y una serie de desórdenes, ausencia de controles adecuados y rendiciones poco claras en los estados financieros del gremio.

Ante esta situación de declaraciones cruzadas, es de esperar que tanto la anterior administración de Gajardo (PC) y la actual, Aguilar (FA) busquen polemizar en torno, dejando de lado las reales necesidades de lucha del profesorado y la necesidad de perspectivar el 2018 con un pliego de demandas y un plan de lucha que unifique al profesorado.