Ayotzinapa es un caso icónico de impunidad y complicidad entre los distintos niveles de gobierno. Bajo el gobierno de Enrique Peña Nieto los partidos que gobernaron durante décadas hicieron hasta lo imposible para dar carpetazo al caso de desaparición forzada de los 43 normalistas. Sin embargo la alianza criminal entre fuerzas de seguridad, el poder judicial y el ejecutivo quedó al descubierto de forma irremediable.
Agrupación Juvenil Anticapitalista @AgJuvAnticapMx
Jueves 26 de septiembre
Durante su mandato el gobierno de AMLO prometió resolver el caso y dar justicia, sin embargo, al concluir su sexenio se presentó una nueva “verdad histórica”, desconociendo las demandas de los familiares de los normalistas desaparecidos y de los sectores que depositaron su confianza en la promesa de justicia. El nuevo relato oculta la participación de los militares en la masacre a pesar de ser un hecho ampliamente documentado.
Tras la reciente incorporación de la Guardia Nacional a la SEDENA como corolario de más de 20 años de militarización que han dejado una estela de muerte y barbarie, con fenómenos tan cruentos como el juvenicidio, el feminicidio y la persecución de nuestros hermanos migrantes, se vuelve más importante que nunca organizarnos para enfrentar la militarización del país.
Quienes militamos en el Movimiento de las y los Trabajadores Socialistas (MTS) e impulsamos la Agrupación Juvenil Anticapitalista (AJA) sabemos que Ayotzinapa abrió los ojos de una generación para la que no hubo vuelta atrás, porque puso al descubierto la colusión entre el Estado mexicano, las fuerzas armadas y el crimen organizado. Hoy como en 2014 nos movilizamos por miles con la misma furia para denunciar que ¡Fue el Estado! y exigir que ¡Vimos se los llevaron, vivos los queremos!