Preocupantes cifras se expresan en la región, frente a altas tasas de desempleo que se expresan en medio de una crisis sanitaria
Viernes 17 de julio de 2020
Según los últimos datos comparativos entre el trimestre de marzo, abril y mayo del 2020, la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Arica, registró un total de 3.133 puestos laborales perdidos en el rubro de la construcción en la ciudad.
Esto se puede comparar con las cifras del año anterior, donde este año hubo 5.420 ocupados, mientras que el año pasado a la fecha habían 8.553 trabajadores, lo que implica una baja de -36,6% de la ocupación en el rubro.
Parte de una baja que se viene reflejando en los últimos cuatro trimestres, pasando de 8.463 ocupados en la construcción a 6.480 a la fecha.
El presidente regional de la CChC Arica, Luis Herrera, expresó “Considero que el trabajo con las autoridades ha permitido que la debacle no sea peor para el sector. En lo concreto es fundamental que se agilicen proyectos de comunas rurales que están adjudicados y que generarán puestos de trabajo, como: la construcción paseo peatonal de Putre o la construcción del APR de Zapahuira. Además, hay otras iniciativas que llevan mucho tiempo esperando ser evaluadas”
A pesar de que las palabras del presidente regional de la CChC intentan apaciguar la preocupante situación, éstas son reflejo y parte de la política que han desplegado los empresarios: la naturalización de los despidos. No solo en el rubro de la construcción.
No debemos naturalizar los despidos y suspensiones
Según los datos de Ciper Chile, la venta de departamentos cayó en un 60% y un 50% en la venta de casas, entre enero y marzo de este año. Cifra que venía en la baja desde el estallido social y que aumentó con la pandemia.
A pesar de todo este panorama, los expertos no prevén una variación dramática durante los próximos meses. Señalando incluso, que en tiempos de crisis, se presentan mejores oportunidades de inversión que en tiempos comunes. Se presumen un amplio estancamiento en los próximos meses bajo el desarrollo de la pandemia.
Añadiendo que no debería mantenerse por mucho tiempo, teniendo en cuenta que para el tercer trimestre de este año, el Banco Central anticipó que el Producto Interno Bruto (PIB) entre 3,75% y 4,75%, mientras que las inversiones subirán 5,1%, proyectándose que a 2022 crecerá entre 3% y 4%.
El descargo de la crisis sobre las y los trabajadores de la construcción
Siendo un rubro que siempre ha contado con condiciones precarias, incluso tomando en cuenta la importancia de éste y los niveles de ganancia que lo transforman en un mercado sólido, que a pesar de las crisis, no llega a verse tan afectado como otros rubros.
Pero mientras los empresarios ofrecen precios bajos, comprar en verde/blanco, bajas tasas de interés, entre otras cosas, existiendo recursos, prefieren despedir trabajadores, cuando los ingresos siguen siendo millonarios.
En la región expresándose en los 3.133 despidos, no contando con todos los trabajos informales o “en negro” que se hacen en la construcción, que agravan la situación, y que son cifras “invisibles” para las autoridades.
Tomando en cuenta que el rubro de la construcción durante el 2019 representaba al 7,8% de los ocupados en la región y por consecuencia de la pandemia, en el primer trimestre de este año descendió a 7,1%.
Que sean las y los trabajadores de la construcción de conjunto a todos los sectores populares y trabajadores que exijan el derecho a una vivienda digna, de acceso universal y garantizada por el Estado, para ademas acabar con toda la especulación inmobiliaria que deja a cientos de miles fuera del acceso a una vivienda, mientras los empresarios se llenan sus bolsillos con los sueños de millones.
Que en base al alto impuesto de las grandes empresas, incluidas las gigantes inmobiliarias, se costeen los derechos sociales básicos y así también, los sueldos de todas y todos los trabajadores de la construcción que actualmente han quedado empujados al hambre con las decisiones de los empresarios, con un ingreso mínimo de $500 mil como canasta familiar.