Neuquén. ATEN: algunas conclusiones a partir de la negociación salarial

Las asambleas de ATEN aceptaron la propuesta del gobierno provincial, con un total de 1893 votos a favor y 1475 en contra, es decir, con una diferencia de 418 votos a favor de la aceptación.
La oferta aprobada contiene un bono no remunerativo ni bonificable (más popularmente conocido como “suma en negro”) y actualización trimestral por IPC, en lugar del IPC mensual y el aumento al básico, que reclamábamos desde la oposición. El único cambio que hubo en la propuesta, que era de actualización trimestral por IPC y una suma fija en negro, es que esta última, pasó a ser por cargo y no por trabajadora/a, lo cual implica, por la generalización del doble turno, la duplicación del bono. Los aumentos de las partidas para refrigerios son irrisorios (de $17 a $ 27 por estudiante). La situación de crisis del ISSN producto del vaciamiento por parte del MPN perjudica a los/ as trabajadores/as que sufren las consecuencias de la pérdida de prestaciones y pone en riesgo la caja previsional, y de esto nada dice el acuerdo del gobierno y la conducción provincial de aten.
La propia conducción provincial salió a defender la propuesta del gobierno, para lo cual tuvo que desperezar a su cómoda “militancia” de rentados, a los que hacía rato no se veía tan “entusiasmados” con algo, catalogando la aceptación de esta propuesta como un “triunfazo”.
A contramano de esta conducción funcional al MPN, en los últimos días, muchas compañeras, en conversaciones y mensajes, se expresaron con cierto desánimo por la aprobación de esta oferta, sencillamente porque implica seguir con los ritmos desquiciantes del doble turno para tener un ingreso que vaya corriendo desde atrás a la inflación.
Desde la oposición, rechazamos esta propuesta y seguimos considerando que era lo más correcto rechazarla. Pero es importante no dejarse caer en el desánimo y analizar un poco algunas cosas que dejó planteado el proceso de negociación y asambleas. Porque, incluso aunque no tuvimos medidas de lucha, se vieron ciertos elementos de una relación de fuerzas (entre gobierno y sindicato y al interior de ATEN entre la conducción y la oposición) que debe ser tomada en cuenta como punto de apoyo para recuperar la militancia de base en el sindicato y construir una alternativa a la burocracia TEP, ya totalmente alineada con el gobierno del MPN. Veamos.

La oferta no tuvo aceptación automática

Si bien, como señalábamos, consideramos un grave precedente la aceptación de una suma en negro, por lo cual nos parece indefendible el acuerdo que se aprobó, es importante destacar que el gobierno no pudo imponer su propuesta inicial sin más. Se puede pensar que esto estaba en los cálculos del gobierno, pero eso es algo secundario. Hay una relación de fuerzas que el gobierno debe considerar si quiere lograr que la propia base del TEP apoye la oferta oficial y la aceptación fue por una diferencia de 400 votos. Esto muestra que, a pesar de todo lo que ha avanzado la conducción TEP en su política de integración al Estado por la vía de defender la política del gobierno provincial de manera sistemática, no ha logrado que las bases del sindicato acepten sin más cualquier tipo de oferta, sobre todo cuando esta no responde a sus expectativas.

En ATEN mandan las asambleas (y eso le molesta al gobierno)

Aunque hay sectores nuevos que han sido educados en la concepción de sindicato burocrático que lleva adelante el TEP, por ejemplo, integrantes de ese espacio que públicamente sostienen que el lugar de decisión es el plenario de secretarios generales, en ATEN deciden las asambleas. No es la primera vez que los medios de prensa o periodistas afines al gobierno provincial salen a hablar contra este mecanismo de decisión, señalando las ventajas que tendría para el gobierno que la conducción pudiera aprobar los acuerdos salariales sin un espacio de decisión activo de las bases.
Si bien la conducción actual ha dado importantes pasos en la burocratización del sindicato, con el cambio de estatuto que aumenta los poderes discrecionales de la conducción provincial y con una práctica de colaboración permanente con el gobierno del MPN a través del CPE, lo cierto es que no puede liquidar el mecanismo asambleario, que sigue siendo un espacio genuino de expresión y decisión de las bases, que tenemos que reivindicar, defender y exigir su realización cada vez que sea necesario.

Nuestra lucha no es solo por salario

Denunciando que el aumento “del 60%” para partidas de refrigerio, anunciado con bombos y platillos por gobierno y burocracia, implicaba 27 miserables pesos por estudiante, las seccionales y agrupaciones opositoras marcamos también lo falso de quienes se dicen partidarios de la “educación popular” y llevan adelante una política que es totalmente funcional a la degradación de la escuela pública por parte del gobierno, que destina en su presupuesto de 2023 casi la misma plata a subsidios de la educación privada que a la construcción de nuevas escuelas. Todo el proceso previo a esta negociación salarial en el que fuimos señalando que las reformas curriculares que promueve la conducción son una combinación de discurso “progre” con una política que busca reducir cargos y precarizar nuestras condiciones de trabajo y las de cursada de nuestras/os estudiantes, ha logrado instalar la idea de que hay que desconfiar de estas reformas en general y del interés por la “educación popular” del TEP y su refrigerio de 27 pesos en particular.

La oposición tiene fuerza y la conducción está desprestigiada

Las principales seccionales, empezando por la asamblea de ATEN capital (la más grande de la provincia), y otras seccionales que dirige la oposición como Plottier, Picún, Chañar, etc, rechazaron la oferta del gobierno. Pero en seccionales que conduce el TEP (como Zapala que la robaron con una maniobra) o Centenario –donde tienen cierta concentración de fuerza- ganó también el rechazo.
La existencia de la oposición es fundamental, tanto como para que la conducción tenga que dar explicaciones y no imponer la política del gobierno sin más, como para que el descontento que ya existe en cada compañera y compañero por las condiciones en que estamos trabajando y en que están viviendo nuestras comunidades educativas, no termine en la impotencia y tenga una alternativa de organización y lucha.

¿Cómo la seguimos?

Es necesario profundizar la organización. La coordinación de las agrupaciones y seccionales opositoras y el trabajo que se viene haciendo con Jornadas unificadas, reuniones de delegadas/os y otras instancias de organización, demuestra que es posible poner en pie nuestro sindicato, ampliando este trabajo y buscando llegar con estas ideas a toda la provincia.
Todas aquellas compañeras y compañeros que consideran que la conducción provincial está dispuesta a acordar más o menos lo que le convenga al MPN tienen razón. Sin embargo, en vez de caer en el desánimo, que es lo que ellos buscan, es necesario profundizar la participación, dándole fuerza a todas las instancias de debate, reflexión y organización que venimos generando desde la oposición, para que sean miles y miles de compañeras y compañeros quienes tomen en sus manos la tarea de recuperar en los hechos este sindicato de las manos de la burocracia, si logramos que haya miles de delegadas/is en toda la provincia, que sean cada vez más las escuelas en las que el plantel docente se organiza junto con la comunidad educativa para reclamar por las cuestiones edilicias y de todo tipo que surgen en cada institución, que cada vez más gente exija la realización de asambleas, que cada vez más compañeras y compañeros denuncien las reformas curriculares del TEP y el MPN como ya lo estamos haciendo; lejos de tener el camino allanado para terminar de vaciar el sindicato, van a tener cada vez menos fuerza ellos y más fuerza las bases, para recuperar las mejores tradiciones democráticas y de lucha de ATEN. Y nuestro sindicato podrá ser también un punto de apoyo para una lucha común en defensa de los intereses de toda la clase trabajadora.