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Red Internacional
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Río Cuarto. Ante el desprecio municipal Inquilinos Autoconvocados decidieron tomar terrenos

La toma inicio esta mañana en Barrio Alberdi con una participación de 30 familias, al momento de cerrar esta nota se superaban las 50

Martes 20 de julio de 2021 13:26

Más de seis meses de reclamos, de corte de puente, y movilizaciones no lograron conmover en lo más mínimo al municipio que sigue hasta el día de hoy sigue haciendo oídos sordos a la emergencia habitacional que sufren miles de familias en la ciudad.

En este contexto de necesidad desesperante las y los vecinos que componen inquilinos autoconvocados decidieron poner punto final a las engañosas negociaciones con las que el municipio ponía freno al reclamo y optaron por ir y tomar lo que el estado no les garantiza, un terreno en el cual poder con los materiales que encuentren construir un lugar propio.

La respuesta del municipio en la persona de Pablo Bertea (sub secretario de hábitat) no se hizo esperar en los medios donde arremetió contra Inquilinos por obstaculizar una negociación que según ellos vienen teniendo con los propietarios de los terrenos tomados.

La verdad es que la necesidad supera cualquier verso que los funcionarios municipales expongan ante vecinas y vecinos que durante la pandemia solo han visto cómo sus ingresos menguaron, fueron despedidas o desalojadas mientras el mercado inmobiliario no para de crecer en una ciudad que cuenta con 15 mil viviendas ociosas destinadas a inflar los ya altísimos precios de los inmuebles.

La respuesta inmediata que buscan es acceder a esos terrenos como parte de un plan de viviendas que contemple la situación puntual de una franja de la sociedad que vive de la precarización sin acceder a un trabajo formal o “en blanco” y que no puede acceder a una vivienda digna.

La salida es colectiva.

Debemos, todos los sectores en lucha contra el ajuste converger en un solo reclamo: trabajo y vivienda digna. Sectores precarizados, sectores desocupados, sin vivienda, trabajadoras y trabajadores formales, todos golpear como un solo puño al desprecio del Estado y encontrar así una salida propia de los trabajadores.