El Gobierno no impone la moratoria hipotecaria que se aplicó en Italia, tal y como pide la Asociación Española de la Banca. Este acto de rapiña capitalista en plena crisis del coronavirus muestra la importancia de medidas urgentes para que no nos hagan pagar la crisis a la clase trabajadora.
Domingo 15 de marzo de 2020
La Asociación Española de la Banca (AEB), pide al Gobierno de Pedro Sánchez que no imponga la moratoria hipotecaria, debido a la gran cantidad de pérdidas que supondría para las distintas entidades bancarias, medida que en cambio ha sido establecida ya por el gobierno italiano.
Afirman sin embargo que contribuirán con las autoridades ante la situación originada por la expansión del Covid-19, también conocido como “coronavirus”, intentando así adoptar una postura más humanista de la que cabría esperarse de estos, para poder hacerse un lavado de cara frente a la situación. Pero, ¿es fiable creer en la “postura humanista” de los bancos que se han beneficiado de cientos de miles de desahucios durante la crisis económica?
Organizaciones como la PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca) exigen, por el contrario, el aplazamiento de todos los desahucios programados por las distintas entidades bancarias a lo largo del mes de marzo o al menos hasta que la crisis sanitaria del coronavirus sea superada, medida que, aunque parezca coherente debido a la situación que atravesamos en el Estado Español, es insuficiente a la larga para acabar con los futuros desahucios.
Una solución más profunda sería que, en vez de exigir que se prorroguen los desahucios programados durante el Estado de alarma decretado ya por el Gobierno estatal, exigir la condonación de las hipotecas además de la expropiación de todas las viviendas vacías para así poder satisfacer las demandas de quienes a día de hoy se encuentran sin techo con un riesgo muy elevado de infectarse. Otra medida en este sentido, sería la creación de una banca pública centralizada y autogestionada por los/as propios/as trabajadores/as y vecinos/as.
Para cumplir las demandas y necesidades de la clase trabajadora en esta crisis sanitaria consideramos que son necesarias estas medidas, entre otras. No son los capitalista ni su gobierno quienes van a tratar de proteger a millones de trabajadores que siguen teniendo que ir a su puesto, sufriendo despido, ERTEs, precariedad y riesgo de contagio. En un Estado en el que son desahuciadas 250 familias diariamente es básica la condonación de las hipotecas ante la crisis del coronavirus. ¡Antes que sus negocios y ganancias, nuestras vidas!
La patronal tiene muy claro de donde saldrían los fondos para su plan ante el coronavirus: del bolsillo de la clase trabajadora, el dinero público y la ya casi quebrada Seguridad Social, que ha pasado de un fondo de reserva de 60.000 millones en 2009 a 1.500 en la actualidad. La clase trabajadora tiene que levantar un programa opuesto al de los capitalistas, que plantee de donde deberían salir los recursos para financiar medidas de emergencia como las que proponemos.
#Coronavirus ¿Qué medidas necesitamos para que los de siempre no paguemos esta crisis