El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, denunció hoy que el campo requiere un "mejor tipo de cambio", a la vez que padece "una presión impositiva asfixiante" y cuestionó la "mafia de los juicios".
Jueves 20 de julio de 2017
Con la presencia de funcionarios del gobierno como el jefe de Gabinete, Marcos Peña, el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, su par bonaerense, Leonardo Sarquís, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, la inauguración de la tradicional exposición de La Rural fue el centro de más exigencias a favor del agropower así como un sesgo antiobrero.
El propio ministro de Agricultura, Ricardo Buryaile, quien fue dirigente de Confederaciones Rurales Argentinas, se posicionó como vocero de los reclamos patronales por incrementar los favores recibidos por el gobierno, nuevamente apuntando sus cañones sobre los trabajadores, así como lo hicieron el ministro de Trabajo Jorge Triaca y el presidente Mauricio Macri.
Buryaile consignó que "el campo no es un sector aislado de la economía: tiene una presión impositiva asfixiante, una necesidad de mercados externos y también una Espada de Damocles sobre su cabeza con miles de juicios de la mafia de los juicio".
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El funcionario de la cartera de Agroindustria (ex Agricultura, Ganadería y Pesca) agregó que "el sector agropecuario lo que necesita es bajar los costos de la logística, mejorar la competitividad, un mejor tipo de cambio, apertura de mercado, y con esto vamos a andar mucho mejor, ya que el mundo crece y demanda alimentos".
"Hay muchas cosas que nos faltan hacer. Este fue un año difícil para la producción argentina. Con 18 provincias en emergencia y miles de hectáreas inundadas", refirió, en tanto que
Coincidió con él su par Miguel Etchevere, presidente de la Sociedad Rural Argentina, entidad que nuclea a los sectores tradicionales ganaderos (ahora también sojeros) de la Argentina. "Está claro que estas son las reglas que van a ayudar a expresar el potencial productivo", sentenció.
La devaluación de diciembre de 2015 y la quita de las retenciones a las exportaciones, así como una gradual disminución de las retenciones a las exportaciones del brote de oro llamado soja, han significado transferencias de más de 100 mil millones de pesos a las patronales del agro. A más de un año y medio de la asunción de Cambiemos, el gobierno ha reiterado en distintas oportunidades lo que anticipó con ingentes beneficios a la cúpula del sector agropecuario.
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