Chile: Arte y Revuelta. Las paredes de Santiago de Chile tras la revuelta: el arte de Caiozzama

Claudio Caiozzi es conocido como “Caiozzama” que es como firma sus obras en las pegatinas de gran escala que monta en la calle. De primera profesión es reportero gráfico, y desde hace cinco años se define como muralista o fotógrafo plástico. Conversamos sobre sus obras y sus perspectivas políticas en la situación actual de Chile.

Venís haciendo arte gráfico en la calle hace cinco años, contanos sobre esto.
Si, comencé en el 2014. Yo me fui a viajar en 2010, viaje cuatro años y viví en países muy diferentes, en Londres, en República Dominicana, en China, viaje por Asia, por Centroamérica, por Europa y ahí fue cuando me empecé a enamorar del street art. Yo no dibujo, entonces finalmente me acomodé al tema del papel pegado y cuando volví en 2014 lo empecé a hacer. En el 2015 renuncio a mi trabajo en un periódico y ya me lanzo.Ya llevo un poco más de tres años viviendo de esto.

¿Siempre expones en la calle?
Hago de todo un poco, pero lo que más me gusta es la calle. Es lo que más me llena, de ahí empezó mi trabajo a derivar en otras cosas. También apareció una galerista que me quiso representar, ella me metió en el mundo del arte, y yo vendo el registro de lo que hago en la calle, hago una serie de once que se venden en distintos tamaños. Este año empecé a experimentar con el collage que también me gustó mucho. A parte trabajo mucho para restaurants, murales para las casas, pero la calle para mí es lo principal.

¿Cuáles son las imágenes que elegís y por qué lo haces?
Es muy random, miro muchas memes y se me ocurren cosas, saco fotos en los museos y colecciono las fotos que después me pongo a mirar. Empiezo con una idea y termina con algo que nada que ver. Me gusta mucho la pintura antigua, me encanta creo que tiene una potencia muy grande, independientemente si eres católico o no. Yo no soy católico ni mucho menos, pero creo que tienen mucha fuerza los ángeles y todo eso. Me gusta usarlo porque siento que el mensaje agarra una gran potencia, pero en verdad es como cuando no tengo la imagen la foto la hago yo, ocupo a mi ahijada, mi sobrino, todo depende de lo que quiero hacer, pero no hay ningún patrón.

¿Cómo sentís que tus obras fueron modificadas con las experiencias que estás viviendo alrededor de la revuelta?
Todas mis obras tienen un mensaje, yo ataco mucho a las marcas, ataco el tema del calentamiento global y la violencia. Había hecho algunas pegatinas por ejemplo con el tema de la salmonera, que acá en Chile están destruyendo el sur. Pero ahora que está la revolución, me metí de lleno con lo que está pasando. Generalmente hago uno o dos murales al mes y en estos dos meses ya llevo ocho. Estoy todo el tiempo pensando qué hacer. Al mismo tiempo, aparecieron muchos artistas que nunca habían hecho nada en la calle, que se fueron a la calle y artistas graffiteros que ya estaban en la calle pero modificaron sus bombas, porque como que hoy en día, todo es como un mensaje.

Acá en Chile si tú caminabas antes de la revuelta, encontrabas mucho mural bonito, pero que no te estaba diciendo nada, simplemente murales de estética linda. Sin embargo, ahora todo te está diciendo algo, todo tiene mensaje, todo dice algo. Este hecho artístico que está pasando es algo increíble, yo no me hubiese imaginado jamás que pasaría algo así.

¿Cómo es eso de gente que no es artista, que nunca había hecho nada y que ahora está haciendo producciones artísticas? Contanos más.
Sí, también darse cuenta que no hay que ser prolijo en el dibujo para poder hacer algo, se puede hacer un afiche, un dibujo, palabras, rayado con spray. Hay mil maneras de expresar, la gente está entendiendo eso al mirar la calle. A mi me han pedido mucho que les explique mi técnica, qué papel uso, con qué pego, y yo entrego toda la información. He visto mucho papel en la calle, se ve de todo: pegado a gran escala, chica, en blanco y negro o color.

Sobre la situación política de Chile, vos ¿qué pensás, qué expectativas tenés?
El lograr algo, es un proceso largo. Yo creo que hay que cambiar la Constitución de la dictadura por una Constitución escrita por todos, donde haya 51% de mujeres 49% de hombres, donde los pueblos originarios tengan sus escaños reservados, eso se está votando hoy mismo. Los diputados lo rechazaron, pero los senadores lo acaban de aprobar y ahora se va a votación a las seis de la tarde.
Estoy armando una obra por si se cumple y otra por si no se cumple.

¿Cómo es la que si se cumple?
Es una celebración de las mujeres. Yo creo que sin las mujeres, se tendría mucha menos fuerza o sea todo lo que han hecho las chicas en las calles, “Las Tesis”, las performers que ha aparecido, han hecho que el mundo mire para acá también y bueno en este país y también en la mayoría del mundo en realidad, es el sistema patriarcal es muy poderoso y viene en el ADN de todos, a todos nos criaron con este sistema y hay que cambiarlo. Pero cuesta mucho cambiarlo y creo que llegó el momento, tenemos la oportunidad de cambiarlo.

La Asamblea Constituyente que masivamente se está pidiendo en las calles, no tiene nada que ver con esta Convención que se quiere hacer, va a haber gente votando la nueva constitución que hoy es parte del gobierno de Piñera. Debería ser una Asamblea Constituyente libre y soberana, donde el pueblo en lucha realmente decida cómo seguir
Es lo mismo pero… es como el matrimonio igualitario, la derecha dijo hay que ponerlo acuerdo de Unión civil porque la palabra matrimonio: no. Siempre la van a hacer difícil.

En la Asamblea Constituyente se reclama, un elector cada 10 mil personas, ¿No? sería un espacio más representativo de lo que proponen ahora.
Claro, pero estamos peleándola para que no sea así. Y creo que por lo menos en el Congreso tenemos harta representación.

Si tuvieses que elegir una frase de todas las que has leído o escrito en los muros que te guste más o que sientas que es más representativa, cuál elegirías?
Chileno, ¿qué se siente ser mapuche?

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Que feliz debe estar el 🙌🏽Negro🙌🏽 😇

Una publicación compartida por Caiozzama (@caiozzama) el 5 de Nov de 2019 a las 1:06 PST

Estamos escuchando mucho, que en marzo va a estallar otra vez la lucha con más fuerza
En un principio era todos los días a toda hora y claro yo siempre supe que esto iba a ir bajando porque tampoco se puede sostener tanto tiempo. Nadie tiene el tiempo para venir todos los días, a todo momento. Yo les digo a mis amigos que han dejado de venir que el viernes es el día que hay que venir si o si, hay que tomárselo como: el viernes se va a marchar. Y lo mínimo son 30.000, 40.000 personas, los viernes siguen siendo el día más poderoso. Ahora en enero y febrero se vienen las vacaciones y va a bajar. Se va a crear una falsa normalidad. En marzo se viene con una fuerza impresionante. El súper lunes, que es cuando los niños entran al colegio, la gente a trabajar, hay mucho tráfico. Ese día la gente va a marchar. El otro día leí una frase en la calle: “El problema es que la solución está en manos del problema”. La solución la tiene el gobierno pero no quiere ceder porque es un gobierno neoliberalista, prima mucho el amiguismo, ahí están todos amigos son los dueños de Chile desde hace generaciones, donde tú muevas la ficha ellos pierden. Entonces no quieren mover ni una ficha, por eso yo creo que es clave cambiar la Constitución, porque la Constitución que tenemos hoy la hicieron los militares, los políticos de la dictadura y los empresarios. Es una Constitución que defiende al mercado y a los empresarios, no defiende a la gente.

Con la ley del SERNAC, es lo que ve los derechos del consumidor, que finalmente le dicen el “león sin dientes”, por qué es un león pero al momento de atacar no te hace nada porque no tiene dientes y aquí le querían poner dientes, lo lograron, se pusieron de acuerdo dijeron sí y el tribunal dijo no, entonces ahí quedó. Porque las empresas aquí priman y la Constitución de ahora tiene que ser todo lo contrario, que la gente sea lo importante como tiene que ser en todo el mundo. Que nos devuelvan el agua, que el agua acá en Chile es privada. Todo eso lo hicieron los empresarios en dictadura y por eso mismo tú ves acá a los pacos, a los militares, ellos tienen las pensiones más increíbles, trabajan la mitad de lo que trabaja una persona normal, les dan todo gratis y a la gente nada. Aquí a una profesora le entregan 200 dólares o menos para que viva después trabajar 45 años. Es la estafa más grande que se ha hecho y la gente se dio cuenta hace mucho tiempo pero nadie se animaba y, ahora se animaron.

Aquí nadie quiere que los minerales acaben, la gente quiere vivir digna, quiere una educación que no sea algo que te vas a estar endeudado por veinte años por estudiar, que finalmente se paga $5000000 y terminas pagando veinte simplemente por pedir un crédito a un banco que lo único que quiere es secarte. Finalmente es que creemos sistema nuevo y creo que tenemos una oportunidad, la oportunidad de hacerlo.

La derecha en Chile era muy poderosa, es muy poderosa, económicamente hablando son los dueños de Chile pero políticamente era muy poderosa y ahora no. Ellos están en el gobierno, pero las elecciones que se vienen obviamente y lo doy firmado que no van a ganar, ni el Congreso, ni de presidenciales, ni nada.

El problema es que en Chile no siempre ha gobernado la derecha y no se vieron cambios profundos en todos estos reclamos que dices, educación, salud, etc. Lo que se oye al unísono es “No son 30 pesos, son 30 años”, por eso se dió con tanta fuerza esta revuelta social. La Asamblea Constituyente, Libre y Soberana sería el comienzo de un cambio que vaya en el sentido de poder ir conquistando estos reclamos.

Bueno, creo que una constituyente nos puede ayudar a que no se cumplan todas estas leyes nefastas que está sacando Piñera, la ley anti-capucha, la ley anti-todo, ahora está en la ley anti-saqueos que viene con la letra chica que nos ataca directamente a nosotros, a los artistas, que sí haces algo político te pueden meter preso. Quieren reprimir para salirse con la suya y espero que el Congreso esté a la altura y no apruebe esas leyes. Hay que seguir este proceso que va a ser muy largo y muy difícil pero yo creo que cuando yo tenga, no sé tengo 40 años, cuando tenga 60 años miraré para atrás y diré bueno lo logramos, va a ser largo pero se va a lograr.

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