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Red Internacional
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Pandemia, educacion y salud. Cancela SEP entrega de útiles escolares en Baja California Sur

Más de 160 mil estudiantes de nivel básico de Baja California Sur dejarán de recibir apoyos escolares.

Lunes 26 de julio de 2021

La Secretaría de Educación Pública de Baja California Sur cancelará, en el próximo ciclo escolar, la entrega de vales de apoyo por concepto de útiles escolares y uniformes para el alumnado de nivel básico. Dicho recurso, según el gobierno estatal, sería destinado al sector salud.

Hasta ahora, el gobierno otorgaba 200 pesos como ayuda para útiles escolares. Además, para uniformes de primaria y de secundaria, el recurso consistía en 350 y 450 pesos, respectivamente. Todo esto representaba una inversión total de casi 73 millones de pesos para los más de 160 mil alumnos de educación básica.

Sin embargo, en el marco del inminente regreso a clases presenciales en todo el país, el gobierno del estado da con esta cancelación un duro revés a la economía de los trabajadores sudbajacalifornianos. Esto a pesar de que, con la pandemia, miles de familias se quedaron sin trabajo o vieron reducidos sus ingresos.

Además, si el gobierno estatal quisiera verdaderamente apoyar el sector salud, como según justifica, comenzaría por centralizar y unificar todos los hospitales y laboratorios privados con los públicos, bajo control de sus trabajadores, en perspectiva de una expropiación sin indemnización para ampliar la cobertura médica.

Al mismo tiempo, debería incrementar los impuestos de los más ricos empresarios, nacionales y extranjeros, y así poder subsanar el tan golpeado sistema de salud pública, construir más y mejores escuelas, contratar personal suficiente y con plenos derechos laborales para estos servicios, becar a todos los estudiantes y proveerlos de todo lo necesario.

No obstante, Carlos Mendoza Davis, el casi saliente gobernador, prefiere afectar los bolsillos de la clase obrera y campesina, buscando no tocar las ganancias de los capitalistas, demostrando así para quién sirve verdaderamente. Las y los trabajadores de la educación, en alianza con las madres y padres de familia, debemos enfrentar esta política que atenta contra la educación pública y gratuita.