El connotado pianista murió de un extraño cáncer diagnosticado recientemente a los 79 años de edad. Sin duda un enorme golpe para el mundo del Jazz, y de quienes se formaron y disfrutaron de su música, marcada por la fusión y la mixtura de estilos que recorrió incansablemente.
Jueves 11 de febrero de 2021
Sin duda es un duro día para el mundo Jazz. La leyenda de los teclados y el piano, Armando Anthony Corea, más conocido Chick Corea, falleció este pasado martes 9 de Febrero, a los 79 años de edad, producto de un extraño cáncer el cual le fue detectado recientemente.
La información fue dada a conocer a través de sus redes sociales dejando algunas palabras, y sentimientos que caracterizaron a Chick, entre las personas que le conocieron.
“Fue un amado esposo, padre y abuelo, y un gran mentor y amigo para muchos. A través de su cuerpo de trabajo y las décadas que pasó recorriendo el mundo, tocó e inspiró la vida de millones de personas.”
“Y a mis amados amigos músicos que han sido como una familia para mi desde que los conozco: Ha sido una bendición y un honor aprendiendo y tocando con todos ustedes. Mi sisón siempre ha sido traer la alegría de crear en cualquier lugar que pudiera, y eso le hecho con todos los artistas que admiro tan cariñosamente –esta ha sido la riqueza de mi vida”.
Comienzo de Chick y el periodo junto con Miles Davis
La carrera de Chick Corea comienza bastante temprano en la escena del Jazz y el Latin, tocando en bandas como las del gran percusionista Mongo Santamaría , y el reconocido saxofonista Stan Getz a comienzo de los años 60’.
Su primera grabación a la cabeza la realiza en 1966, con el título de Tones for Joan’s Bones, contando con la colaboración de músicos como el bajista Steve Swallow, y el baterista Joe Chambers. Seguidamente en 1968, grabará en el trío formado junto al joven y talentoso bajista/contrabajista Miroslav Vitous, y al colosal Ron Haynes, con el título “Now He Sings, Now He sobs”. También grabará otros discos como el “Is” y “Sundance” donde compartirá junto al contrabajista Dave Holland y el baterista Jack De Johnette, con quienes también fue parte de la banda de Miles Davis a finales de los años 60’. En este periodo también participará en discos centrales en la carrera de Davis en su periodo fusión, como es “In a Silent Way” y el afamado “Bitches Brew”.
En este periodo también tocará con otros importantes músicos como el baterista Tony Williams, el percusionista Airto Moreira, y el guitarrista británico John McLaughlin.
El periodo Return to Forever
Sin dudo una de las primeras bandas de Corea con las que logra impactar en la escena de Jazz, y convertirse en un referente de los nuevos sonidos y el Jazz Fusión, es Return to Forever. Agrupación conformada por músicos de la talla del bajista Stanley Clarke, el flautista y saxofonista Airto Moreira en la batería, y Flora Purim en las voces, durante la primera formación. De aquí aparecerán discos como el homónimo “Return to Forever” y el “Light is a Feather”.
Posteriormente la banda irá teniendo modificaciones, como el recambio de Moreira por el baterista Lenny White, y sumándose en otro proyecto el guitarrista Bill Connors. Luego de esto en la banda se incorporará el guitarrista Al DiMeola.
A su vez Corea realizará desde mediados de los años 70’ discos de gran importancia en su carrera como “My Spanish Heart” (1976) y “Touchstone” (1982).
El periodo Elektric y Acoustic Band
Sin embargo entre las constante reinvenciones del pianista, algunos de los más relevantes proyectos a nivel agrupacional se hacen presentes, como es el caso de la Chick Corea Elekctric Band.De aquí se desprendieron trabajos como el homónimo “Chick Corea Elektric Band” (1986), el gran “Eye of the Beholder” (1988) y el “Beneath the Mask” (1991) entre otros. Esta agrupación estuvo conformada por el guitarrista Frank Gambale, el bajista John Patitucci, el baterista Dave Weckl, y el saxofonista Eric Mariental. Incluso en su primer disco particpa el guitarrista de Tribal Tech, Scott Henderson, quien deja prontamente la banda.
A su vez en 1989 forma la Chick Corea Acoustic Band conformada por los bateristas y bajistas de la Elektric Band, John Patitucci y Dave Weckl, enfocado a un estilo más cercano al swing y clásicos.
Los 90’s y 2000: El reflejo de su amor por la música y la admiración por grandes artistas
Durante la década los 90’ Chick Corea realizó una serie de trabajado orientados a la interpretación de los grandes artistas de la historia del Jazz, al igual que expresando su amor por la música clásica.
Discos como el “Play” de 1992 junto al cantante Bobby McFerrin, y el disco Expressions de 1993, dan cuenta de este periodo del pianista, al igual que su tributo a Wolfgang Amadeus Mozart en 1996 otra vez junto a McFerrin.
Ya durante el 2000, los discos con el músico de Banjo Bela Fleck en el 2007, conocido por Bela Fleck and the Flecktones, el dueto junto a la pianista Hiromi Uehara en el 2009, y The Vigil en el 2013, junto al bajista Hadrien feraud, dan cuenta de la multiplicidad de dimensiones en las que supo desenvolverse Corea.
El pasado año 2020, Chick lanzó su último trabajo “Plays” en que interpreta a grandes artistas de diferentes estilos como el pianista Bill Evans, Stevie Wonder, Gershwin, Frédiric Chopin y Antonio Carlos Jobim.
El legado de Chick Corea
Esta despedida de Chick Corea, deja consigo un legado musical absolutamente relevante, no sólo en el mundo del Jazz, sino de la música en su conjunto. Un pianista que experimentando y reinventándose permanentemente pudo tocar junto a importantes referentes del Jazz, y nutrirse de ellos, de manera cada vez más innovadora. Tanto a nivel electrónico, como a nivel acústico Chick Corea dejó una impronta revolucionaria propia de las vanguardias, que rompen barreras sobre lo que escuchamos cotidianamente, pero también siempre firme a sus principios y raíces en la música de cámara, permeado por referentes de lo que se conoce como el periodo “clásico”.
Con una personalidad totalmente humilde, y ávida por recoger las vivencias de las nuevas generaciones y traspasar sus enormes experiencias en la música, Chick Corea puede ubicarse en ese reducido grupo que consigue traspasar en cierta manera las fronteras propias de los géneros, y llegar a importantes audiencias que cautivadas por lo novedoso de sus sonidos y el respeto por las grandes obras de la música, rondará en los recuerdos de quienes lo conocieron, quienes tocaron con él, y en quienes siguen en su eterno amor por la música y la sensación de tocar.