Continúa la persecución contra científicos del Foro Consultivo por irregularidades en el uso de recursos del Conacyt, mientras que el titular de la Fiscalía General de la República (FGR) tiene sus propias irregularidades con dinero de esa misma institución.
Miércoles 11 de mayo de 2022
Desde el mes de septiembre de 2021, la (FGR) inició una investigación contra científicos del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT), cuestión que se convirtió en un escándalo porque se les inició un proceso judicial por delincuencia organizada y desvío de recursos. Dicha acusación no procedió en su momento, pero la investigación continúa por irregularidades en el uso de recursos públicos en: rentas, tenencia, declaraciones fiscales y otros trámites con el objetivo de vincular a científicos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en ilícitos financieros.
Los supuestos trámites irregulares pertenecen a diversos ámbitos como arrendamientos, licencias de conducir, altas y bajas de placa, tarjetas de circulación y declaraciones fiscales, en donde la FGR a través de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) giró documentos hacia la Secretaría de Movilidad y Secretaría de Finanzas de la CDMX, para ampliar las investigaciones donde incluso se planteó que, en caso de no contar con irregularidades en el periodo 2013-2020, se debe realizar una búsqueda en sus bases de datos con el objetivo de hallar alguna anomalía que pueda vincular a los científicos.
Entre los académicos imputados se encuentran: Manuel Martínez Fernández, esposo de Julia Tagüena, ex coordinadora de la FCCyT, Jesús Antonio del Río Portilla, investigador de grado "C" de Energías Renovables de la UNAM, Karla Graciela Cedano, actual secretaria de Gestión Tecnológica de Energías Renovables de la UNAM, entre otros.
Esta investigación refleja, entre otras cosas, las pugnas intestinas que enfrentan al gobierno con sectores de la academia que están vinculados por distintas vías a las anteriores administraciones.
Por otro lado, estos científicos del Foro se embolsaron 571 millones de pesos, valiéndose de mecanismos legales e institucionales que les otorgó el Conacyt, mecanismo que el fiscal general de la república, Alejandro Gertz Manero no cuestiona.
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La otra cara del Conacyt, los favores a Gertz Manero
La razón de que estos mecanismos de reparto injusto de los recursos para la investigación no sean cuestionados es porque el partido en el poder, Morena, busca servirse de ellos para beneficiar a sus funcionarios, como ejemplo tenemos al mismísimo Gertz Manero, quien es un empresario millonario, evasor de impuestos y ex funcionario priista de la guerra sucia. Y que hace no mucho enfrentó su propio escándalo dentro el Conacyt, ya que busca beneficiarse de los estímulos a la investigación cuando él no realiza investigaciones.
Y es que a pesar de que fue acusado por el sector científico y académico de plagio, ya que 250 investigadores presentaron contra él una denuncia -que fue demostrada-, por ostentar a su nombre investigaciones de otros autores, el Conacyt lo premió otorgándole el nivel III del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), el rango más alto para recibir estímulos económicos por parte del propio Conacyt, siendo que en otros casos ha aplicado fuertes castigos contra quienes cometen lo que es conocido como “robo de propiedad intelectual”, por ejemplo, la expulsión total de estudiantes que plagian la tesis.
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¿Y la tan celebrada cruzada contra la corrupción?
Las peleas en las alturas destaparon el verdadero carácter que tiene Gertz Manero, como lo ocurrido el mes pasado con Julio Scherer Ibarra (ex consejero jurídico de la presidencia), quien denunció ante la Fiscalía Especializada en Materia de Combate a la Corrupción al actual fiscal general de la república por tráfico de influencias. Lo que ocurrió junto con el caso en que el fiscal usó el poder que le otorga su puesto público para encarcelar a familiares políticos bajo el argumento de “homicidio por falta de cuidados”.
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Pero a pesar de la gravedad de los cargos, ninguno de los dos bandos se preocupa por orientar el presupuesto para terminar con la precariedad laboral en la que se encuentran miles de profesores de asignatura y jóvenes investigadores. Tampoco por rescatar a las ocho universidades en quiebra, ni resolver la huelga del Colegio de Posgraduados ni resolver ninguna demanda que han planteado los trabajadores de la educación.
Así, frente a esta disputa el camino es la organización y la movilización de los trabajadores, que sea independiente del régimen y sus partidos, ya que ninguno nos representa, porque en el fondo ambos están de acuerdo en precarizar nuestras condiciones de vida. Por esa razón invitamos a las y los trabajadores de la educación a sumarse este 15 de mayo al contingente formado por la Asamblea de Trabajadoras y Trabajadoras en Lucha, como parte de un bloque combativo e independiente para luchar por nuestros derechos.