Este domingo 10 será el lanzamiento oficial de la fusión entre el Partido Poder e Izquierda Autonoma (IA). Ambos partidos venian trabajado desde hace meses para lograr este proyecto comun, pero qué rol cumplirá esta fusión en el marco de los debates estratégicos que se vienen dando dentro del Frente Amplio.
Miércoles 16 de enero de 2019
Este domingo a las 10 am en el teatro Azares se realizará el lanzamiento del nuevo partido político y que gracias a la fusión de las agrupaciones tendrá más de 12 mil militantes, incluyendo a las diputadas Camila Rojas (IA) y Claudia Mix (Poder).
A dicha instancia concurrirán distintos referentes y representantes tanto del Frente Amplio como de las organizaciones que la componen. Pero la invitación también fue extendida a los partidos de la ex-Nueva Mayoria. Hasta ahora estarían confirmados dirigentes del PS y PC.
Según declaraciones entregadas durante el anuncio de la fusión, el nuevo partido pasará a denominarse "Comunes" debido a la "vocación de mayorias y poder", además el partido representará una nuevo partido legal para el Frente Amplio (FA) de cara a las próximas elecciones municipales del 2020.
Para el futuro secretario general del partido, Jorge Ramírez, el horizonte de trabajo estará enfocado en fortalecer el FA y extenderlo a nuevos espacios donde no ha podido llegar: “Vamos a ponernos a trabajar inmediatamente para ayudar a desbordar el Frente Amplio, a construir un país en común con los sectores que incluso en nuestra coalición han estado potergados".
Para la organización el aporte que integraría Poder estaría dado por el trabajo territorial que han logrado extender en algunas zonas del país, mientras que IA posee una trayectoria de varios años en movimiento estudiantil.
Recordemos que ambas organizaciones venian discutiendo el proceso de fusión con la denominada "convergencia", pero ambas fueron excluidas de dicho proceso, lo que las acercó a ver la posibilidad de armar un espacio común.
Además de la "Convergencia" y "Comunes", el Partido Igualdad también estaría abriendo un proceso de fusión con otros grupos a la izquierda del FA como Ukamau o el MDP.
Converger para qué proyecto político
Sin lugar a dudas el debate abierto dentro del FA se ha ido acelerando a medida que las elecciones se aproximan, principalmente porque los sectores que han buscado constantemente por correr hacia la izquierda al conglomerado deben luchar con el enorme peso político que poseen tanto Revolución Democrática (que posee la mayoría de la bancada parlamentaria), el Partido Humanista y el Partido Liberal. Cuestión que tensiona objetivamente el FA hacia el centro político.
Pero hasta ahora dichos procesos de convergencia parecieran estar mas enfocados en la calculadora electoral que en el desarrollo de organizaciones de acción que puedan apostar a lo que las mismas organizaciones se proponen lograr: sacar a Chile del neoliberalismo.
Y no es casual que mientras la Convergencia o Comunes debatía su fusión, la lucha de clases sigue desarrollándose en el país, y pareciera ser que el centro de la actividad política del FA sigue centrándose en la actividad parlamentaria e institucional.
La comprobación de dicha estrategia quedó clara con el descalabro político que se le abrió al gobierno con el caso Catrillanca, donde en vez de apostar a movilizar a un mínimo de su base electoral contra el gobierno, el FA apostó sus fichas a la interpelación a Chadwick o a sondear la acusación constitucional, quedando así atrapada la iniciativa en los eternos pasillos del congreso nacional.
Por eso es que aun cuando puedan proclamar mucho sobre la necesidad de anteponer las ideas (y el programa) a la calculadora, pareciera que dichas declaraciones son tan profundas como la convicción de Santibañez cuando exclamó "bien muerto el perro", en alusión a Jaime Guzman.