Pro patronales. Con 6 millones de niños bajo la pobreza, el Frente de Todos baja retenciones a las automotrices

El Gobierno Nacional anunció este viernes la eliminación de los derechos de exportación para las exportaciones incrementales de la industria automotriz incluyendo autos y autopartes. En concreto, en 2022 las terminales y autopartes solo pagarán derechos de exportación hasta el monto de las exportaciones facturado en 2020 (4,5% o 3%) y una vez superado, tributarán 0% para las nuevas exportaciones o exportaciones incrementales, lo que implica una prórroga y una ampliación del régimen establecido por el decreto 150/2021 que vence el 31 de diciembre de este año.

Mientras la pobreza afecta a casi 19millones de personas, y dentro de ellos hay casi 6 millones de niños que pasan hambre en el país, desde el Frente de Todos priorizan beneficiar a grandes multinacionales como Toyota y Volkswagen, que son líderes en ventas a nivel global. En 2020, a pesar de la pandemia vendieron 9,53 millones y 9,3 millones de vehículos, respectivamente.

Tal como se leer en el comunicado de prensa, el anuncio tuvo lugar en el Palacio de Hacienda y participaron los ministros de Economía, Martín Guzmán, y Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, acompañados por la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Cecilia Todesca; el secretario de Política Económica, Fernando Morra; su par de Política Tributaria, Roberto Arias; el secretario de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial Externa, Ariel Schale; y la jefa de gabinete del Ministerio de Economía, Melina Mallamace.

No faltaron los representantes sindicales del SMATA, Ricardo Pignanelli, y su par de la UOM, Antonio Caló. Los mismos que hicieron posible la aplicación de una reforma laboral en Toyota, afectando conquistas de los trabajadores y a pedido de la empresa Es una medida repudiable en el marco de los debates que se abrieron alrededor de la reforma laboral que exigen las patronales, empezando por eliminar las indemnizaciones.

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También participaron el presidente de ADEFA, Daniel Herrero (Toyota); su director Ejecutivo, Fernando Rodríguez Canedo; Martín Galdeano (Ford); Gonzalo Ibarzabal (Nissan); Manuel Mantilla (Mercedes-Benz); Rodrigo Pérez Graziano (Grupo automovilístico internacional), Pablo Sibilla, Pablo (Renault), María Angela Stelzer (VW), Martín Zuppi (FIAT), Federico Ovejero (General Motors). Y directivos de ADIMRA y de la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC).

Contrapuntos

“Para que el mercado interno y la economía puedan crecer de manera sostenible es necesario generar más divisas. Potenciar el crecimiento de las exportaciones e ir resolviendo los problemas de las deudas apunta a esa dirección. Ambas cuestiones están ocurriendo”, señalaba Guzmán.

Si uno lee estas palabras, podrían aplicarse sin distinción a cada anuncio realizado por el Gobierno con el fin de generar divisas. Divisas para pagar una deuda que no para de crecer, y que fue tomada de manera fraudulenta, claro. Sin embargo, volviendo al sector automotriz y autopartista, se trata de una rama industrial que en este país funciona como una ensambladora de partes. Es estructuralmente deficitaria en materia de divisas, esta condición hace que ante aumentos de la producción suba la demanda de piezas importadas. Para producir un vehículo se usa un 70% de piezas que provienen de otro lugar del mundo, y apenas un 30% de piezas fabricadas nacionalmente. El resultado, es que para funcionar esta industria necesita más dólares de los que “genera” a través de sus exportaciones.

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Por su parte el ministro de Producción, Matías Kulfas señalo que “la mayoría de los proyectos que se presentaron tienen 70% de orientación al sector externo, que es algo que debemos consolidar porque nos permite darle sostenibilidad a la política industrial, a través de una política macroeconómica que debe tener la previsibilidad que todos esperamos." Lo que Kulfas señala como algo novedoso, no es más que una realidad propia de esta rama que exporta cerca gran parte de lo que produce.

Según los datos de ADEFA en 2019, la producción fue de 314.787 unidades, y se exportaron 224.248 unidades. En 2020, pandemia de por medio, la producción fue de 257.187 unidades, y se exportaron 137.891. Siendo Brasil el país principal destino de las exportaciones.

Prioridades

El gobierno eliminó el IFE diciendo que lo peor de la pandemia había pasado, con ese argumento Martín Guzmán dejo a más de 9 millones de personas sin ese sostén que ya era insuficiente. Hasta el momento no se han confirmado el retorno del IFE antes de las elecciones de noviembre, no puede descartarse, pero tampoco el oportunismo que impulsaría esa decisión.

Pero para las multinacionales automotrices los “beneficios” de la pandemia llegaron para quedarse, ya que se eliminará las retenciones a las exportaciones que superen los bajos niveles de 2020. ¿Cuánto cuesta este regalo a las multinacionales? Según un tuit del periodista Alejandro Bercovich podría acercarse a los U$S 1.000 millones.

Muchos indignados por el subsidio de $15.000 a la clase media para que blanquee a 100 mil domésticas y ninguno por la rebaja de retenciones a las automotrices por más de U$S 1.000 millones para que contraten a 5 mil nuevos operarios. ¿Será porque son minas o porque no exportan?

— Alejandro Bercovich (@aleberco) October 2, 2021

De esta manera, la semana que quedó atrás incluyó beneficios a las automotrices y al agropower, levantando las restricciones a la exportación de la carne. Si sumamos la Ley de hidrocarburos que profundiza el modelo extractivista contaminante para que sigan ganando las petroleras, vemos que no se trata de una medida aislada, sino de un rumbo fijo –pro patronal- del Gobierno.

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