En Argentina se reportó la cifra más alta de contagios en los últimos 5 meses y en Rosario subieron a más del doble los casos en sólo 15 días.¿Qué medidas hay que tomar?
Sábado 3 de abril de 2021 19:12
(Fuente: Gobierno de la provincia de Santa Fe)
En la última semana se declaró la circulación comunitaria en el país de la nueva cepa P1, más conocida como Manaos. Los reportes diarios volvieron a ser una de las noticias centrales con cifras cada vez más altas. Las vacunas son un negocio millonario disputado entre las principales potencias mientras millones de personas en todo el mundo siguen sin recibir dosis alguna.
Antes del retorno a clases los docentes denunciaron las condiciones en que se encontraban las escuelas y exigían a los gobiernos que garanticen que se puedan desarrollar de forma segura las tareas pedagógicas para volver. En Santa Fe Omar Perotti sólo ejecutó un 9% del presupuesto en infraestructura asignado al Ministerio de Educación. Durante un año entero las escuelas estuvieron cerradas y no se realizó ninguna obra.
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Un relevamiento realizado en 150 escuelas por Amsafe Rosario y ATE indicó que el 42% tiene burbujas aisladas por coronavirus y un 20% presentaron al menos un caso positivo de Covid. La mayor parte corresponde a alumnos. Las razones de esto se encuentran en que un alto porcentaje de estas escuelas tiene acceso irregular al agua potable, baños que no se encuentran en condiciones y falta de personal para realizar la limpieza necesaria según los protocolos.
La Ministra de Salud de la nación, Carla Vizotti, dijo que no hay contagios en escuelas y lugares de trabajo. Una mentira descarada. La semana pasada un docente de una escuela de Buenos Aires falleció por coronavirus y en semana santa murió otro de Jujuy, el sexto desde que volvieron las clases. “Son muertes evitables y, por lo tanto, sus responsables tienen que ser nombrados. Hay que ponerle un freno a este desprecio por la salud y la vida de toda la comunidad educativa” dice Tamara Cañizalez, docente reemplazante de la agrupación La Marrón.
Lo que sucede con el transporte público también es crítico. Circulan por redes videos de los subtes en Ciudad de Buenos Aires donde viajan hacinados. Allí son cientos de miles de trabajadores que tienen que exponerse porque no pueden optar por otro medio de traslado ni tampoco pueden dejar de trabajar. No es privativo de la capital del país.
En Rosario, luego de la readecuación (ajuste) del transporte que implementó el gobierno de Javkin con acuerdo de prácticamente todas las fuerzas políticas, incluyendo la centroizquierda de Ciudad Futura, circulan menos coches en la calle y las unidades se llenan. Imposible garantizar el distanciamiento necesario y corren riesgo tanto los usuarios como las choferes y los choferes. Un caldo de cultivo para el covid, una bomba sanitaria. Es urgente la necesidad de aumentar las frecuencias para disminuir la cantidad de pasajeros por unidad sin aumentar el costo del boleto (que ya es excesivamente caro). Esto tiene que ser financiado con impuestos de emergencia a las cerealeras que, con o sin pandemia, ganan fortunas.
Vacunas for export
El gobierno anuncia viajes patrióticos para traer vacunas pero el porcentaje de inoculados en el país es muy bajo, más aún considerando que la gran mayoría no recibió la segunda dosis. Sonia Martorano, Ministra de Salud de la provincia de Santa Fe, directamente informó que no aplicará la segunda dosis como forma de cubrir a un porcentaje más amplio de la población. Aún así, muchos de los trabajadores esenciales aún no están ni en las conversaciones del gobierno.
“Llegamos al colmo de tener un laboratorio que produce el principio activo de la vacuna AstraZeneca y exporta el total de su producción”, dice Octavio Crivaro, referente del PTS en el Frente de Izquierda Unidad, en relación al laboratorio mAxbience del empresario amigo del gobierno Hugo Sigman. “Hay que empezar por declarar de utilidad pública el laboratorio para acceder de manera masiva a la vacuna”. Desde la banca del diputado nacional Nicolás del Caño del PTS Frente de Izquierda Unidad presentaron un proyecto de ley para que se declare de utilidad pública a mAbxience biotech.
Organizar la solidaridad desde abajo
“Exactamente; se asume que esas partidas eran necesarias en forma extraordinaria por la pandemia”. Esa fue la respuesta del Ministro de Economía cuando se le consultó si en el 2021 desaparecerían el IFE y ATP. Se abrió también todos los lugares de trabajo con “protocolos” bajo pretexto de reactivar la economía. Hoy las cifras anuncian realidades distintas: en índice de pobreza subió al 42% y el 10% de la población es indigente. En el gran Rosario más de 500.000 personas son pobres, es decir, más de un tercio de la población. El índice de desocupación es igual de preocupante: más del 13,6%. El segundo más alto del país.
Mientras tanto la CGT duerme la siesta y deja pasar los ataques. No se puede seguir esperando y es fundamental que en los lugares de trabajo se conformen comisiones de seguridad e higiene, compuesta por trabajadores, que tengan plenos poderes para garantizar que no haya contagios.
La inflación se disparó mientras los salarios se hundieron. El decreto prohibiendo despidos tuvo la misma eficacia que un billete de fantasía y los despidos se multiplicaron. Hasta el mismo Estado precariza con salarios por debajo de la canasta familiar y con malas condiciones. Los trabajadores de la salud, esos que los funcionarios políticos llamaban héroes, hoy son desoídos por el gobierno. Como los enfermeros y enfermeras autoconvocados que piden que se aplique la Ley 13.968 que los reconoce como profesionales. No pueden seguir precarizados: tienen que reconocerles sus derechos laborales y un sueldo igual a la canasta familiar.
Las medidas de autocuidado como el uso de barbijos, las reuniones reducidas y al aire libre, el uso de alcohol, entre otras, son necesarias y eficientes. Pero con eso no alcanza y desde el discurso del Gobierno se responsabiliza de manera directa a la población por la suba de contagios.
Un plan de testeos y rastreos, permitiría un control y epidemiológico, para planificar medidas sanitarias de manera centralizada. La unificación del Sistema de Salud, permitiría que todos los recursos disponibles públicos, privados y de obras sociales, estén al servicio de combatir la pandemia, bajo la órbita del Estado y con control de trabajadores y la comunidad.
La pandemia demostró que los que son realmente esenciales son los trabajadores y muchos se organizaron por salario, contra el maltrato patronal y los despidos. Los trabajadores de Hey Latam ante la quiebra trucha del empresario Stauffer ocuparon pacíficamente el edificio y pusieron de pie la cooperativa RecTuel. En la localidad bonaerense de Pérez Millán ocuparon el frigorífico ArreBeef y hoy enfrentan el plan de despidos de la patronal. El apoyo a cada conflicto con comités de lucha y todo lo que ayude para que desde abajo, se pueda imponerles a las centrales sindicales que abandonen la tregua y la subordinación a las políticas de ajuste y convoquen a un verdadero plan de lucha por las demandas de trabajadores y trabajadoras y de los sectores populares para que la inflación, la desocupación, la precarización laboral y la pobreza no sigan golpeando a la clase trabajadora.
