Reivindicación de la “paz” en Chiapas y denuncia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación como “supremo poder conservador” y “una minoría rapaz” impulsora de los planes neoliberales.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Viernes 23 de junio de 2023
Presentó la conferencia el presidente López Obrador reivindicando la “paz” que reina en Chiapas, como si los desplazamientos forzados de comunidades enteras y los ataques paramilitares contra las comunidades zapatistas no existieran.
Luego dio la palabra a Rutilio Escandón, gobernador de Chiapas, quien reivindicó las ayudas de la nación y en especial la integración del estado al corredor interoceánico. Se viene el progreso en el sudeste, sí, pero en favor de los intereses de trasnacionales y empresarios.
Dio paso a Luis Crescencio Sandoval, titular de la Secretaría de Defensa Nacional, quien dio un informe en el cual señaló que todos los delitos van a la baja en Chiapas.
Todo el despliegue para invisibilizar la cruda situación que se vive en la entidad, en la cual están en desarrollo alrededor de 40 megaproyectos, tanto de infraestructura (producción de energía a partir de fuentes renovables y también de infraestructura), todo lo que implica el corredor interoceánico, minería, cultivo de palma de aceite y turismo.
La democracia en disputa
“¿Por qué no decretar las reformas electorales contenidas en el plan B?” consultó un periodista. La respuesta de AMLO fue un cuestionamiento al poder judicial como representante de una “minoría rapaz” y enumeró las entregas que llevaron adelante el PRI y el PAN desde tiempos de Salinas de Gortari: desde poner en venta los ejidos y dar paso a grandes ejidatarios, la reforma de pensiones, los fraudes electorales, y denunció que todas las reformas constitucionales de esos años fueron contra el pueblo.
Pero lo cierto es que cuestiones centrales como la militarización -inaugurada por el panista Felipe Calderón-, la explotación de hidrocarburos y otros recursos en manos de asociaciones público-privadas -herencia de los gobiernos del PRI y del PAN-, las políticas antimigratorias ordenadas desde Washington -continuidad también de sexenios anteriores, ahora combinadas con propuestas de planes sociales-, la precarización laboral y la creciente informalidad del trabajo, y el sistema de pensiones liderado por las afores, todo ese legado neoliberal no sólo se mantuvo, sino que se ha profundizado.
López Obrador subrayó que no se termina con todo eso con decretos, si no con la decisión del pueblo. Anunció el envío de una nueva iniciativa de reforma de la Constitución -que incluirá la elección directa de jueces, magistrados y ministros-, y que tiene la expectativa de que tenga una mayoría en el congreso.
Denunció que los ministros violan el artículo 127 de la constitución que establece que ningún funcionario puede ganar más que el presidente -cuyo sueldo es de $140 o $150 mil-, mientras ellos ganan $ 600 mil y manejan un fideicomiso de más de $ 20 millones. Cuestionó la autoridad moral de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que critiquen al poder legislativo.
“No tienen respeto por el pueblo, la política se hace en la cúpula. Se les olvida que la política es asunto de todos. La gente no deja pasar nada y por eso se ha ido avanzando en la transformación. Les estamos ganando a los reaccionarios aun cuando cuentan con la mayoría de los medios de comunicación. Todos los días hay bombardeo de mentiras” señaló López Obrador, en defensa de la democracia actual, que se reduce a votar a los funcionarios que detentan el destino del país.
El presidente criticó también las candidaturas independientes que dijo habían promovido desde el INE, por personajes como Quadri, y recordó que el actual legislador en una oportunidad había declarado que si no existiese Oaxaca, Chiapas, Guerrero, México sería una potencia. Y rebatió que, si no existieran esos estados, no existiría México.
Deja de lado el hecho de que las candidaturas independientes -con numerosas trabas que los personeros de la derecha siempre pueden sortear- es el único resquicio del antidemocrático régimen electoral mexicano para que organizaciones de trabajadores y de izquierda independientes del gobierno y de la derecha puedan desplegar en el terreno electoral una alternativa que defienda los derechos de los trabajadores, las mujeres y la juventud a partir de poner en cuestión las ganancias de trasnacionales y empresarios y la alianza reaccionaria entre capitalismo y patriarcado.
Defensa de los planes sociales
Otro periodista le planteó que, si se pierde mayoría legislativa en las próximas elecciones, se pueden perder planes sociales y consultó si ayudaron los planes sociales para mitigar el crimen en Chiapas. El argumento para fundamentar como una “necesidad” el voto al Morena en las próximas elecciones. Y preguntó qué responde la secretaría de gobernación ante los ataques que recibe por ser mujer.
López Obrador sostuvo que los programas de bienestar llegan a 25 millones de hogar, sobre un total de 35 millones, hay otros 5 millones que se benefician del presupuesto de manera directa. Afirmó que está creciendo la economía, hay capacidad de consumo. Aumentó el salario, hay empleo, México es de los países con menos desempleo en el mundo. Según el presidente un obrero de la construcción está ganando hasta 60 mil pesos mensuales.
“Hay una situación muy favorable, se beneficia todo el pueblo, hasta los de arriba. La estrategia nuestra es apoyar desde abajo hacia arriba” señaló el presidente.
Sin embargo, aún con los aumentos al salario mínimo y el freno relativo de la inflación, la realidad es que amplios sectores de la población no llegan a cubrir los gastos básicos.
El presidente aprovechó para agitar contra el colonialismo y el discurso civilizatorio europeo en defensa de la “identidad nacional”, y de la grandeza cultural, mientras la realidad es que mantiene las puertas abiertas a las trasnacionales herederas del colonialismo, como la empresa Iberdrola.
Sobre el trato a la secretaría de Gobernación, sin darle espacio para responder, la defendió él por su profesionalismo y su sensibilidad. Posteriormente, Luisa María Alcalde defendió los avances del feminismo por la presencia de mujeres en el gobierno y en puestos de poder y sostuvo que la cuarta transformación es también una revolución en las conciencias.
Pero la realidad es que, independientemente de una mujer encabeza una secretaría, una gubernatura o la presidencia, eso no significa que las mujeres dejen de ser mayoría entre los sectores más empobrecidos o los más precarizados. Dina Boluarte, la presidenta de Perú, es mujer y reivindica la brutal represión contra el pueblo de ese país andino, por ejemplo.
La “paz” de la militarización en Chiapas
Ante el cuestionamiento en torno a la violencia que se vive en municipios como Frontera Comalapa, donde varias comunidades fueron desplazadas por la violencia desplegada por cárteles del narcotráfico, según dieron a conocer medios como Proceso, o los ataques paramilitares contra comunidades zapatistas como la Moisés Gandhi, la respuesta del presidente fue que ahí está la guardia nacional para defenderlos.
Pero en realidad, en un reportaje publicado en el semanario citado, hay varios testimonios de pobladores que narran que tanto el Ejército como la Guardia Nacional no aparecieron cuando les avisaron de las balaceras.
Lo que sucede es que los bienes naturales de Chiapas, así como su ubicación geográfica, están en la mira no solo de los megaproyectos del gobierno, sino también de trasnacionales que buscan instalarse ahí una vez que esté edificada la infraestructura que requieren para sus operaciones de producción y logística.
