Un trabajador monotributista contratado bajo decreto 1109 con más de cuatro años de antigüedad en la cartera de Wado de Pedro, fue despedido telefónicamente en plena cuarentena. De esta manera se desconoce el DNU que prohíbe despidos y suspensiones por el plazo de 60 días, dictado por Alberto Fernández y firmado por el propio ministro.
Domingo 12 de abril de 2020 14:00
El decreto surgió tras la presión de distintos sectores de trabajadores afectados, especialistas y diputados de izquierda como Nicolás del Caño, que veían que las patronales del sector privado estaban haciendo caer sobre las espaldas de los trabajadores la crisis sanitaria y económica, ya sea reduciendo salarios o despidiendo. Sin embargo los empresarios siguieron despidiendo y rebajando salarios, como se ve en el caso de Techint, y los jóvenes precarizados de las firmas de comidas rapidas, solo por nombrar los casos más emblemáticos. Pero evidentemente el gobierno ni siquiera está haciendo valer el decreto en la propia órbita estatal.
Un trabajador del Ministerio del Interior se comunicó con La Izquierda Diario y nos contaba cómo había sido despedido: “El jueves 26/03 ya con la cuarentena instalada, recibo un llamado de parte de la coordinación del Programa que me contrata en el Ministerio del Interior para notificarme que habían decidido no continuar con la contratación (a partir del 2020, la nueva gestión tomó la decisión de hacer contratos hasta el 31/03/20 a modo de prueba para todos los compañeros monotributistas)”
Trabaja en la Administración Pública Nacional de manera continua desde abril de 2012, y discontinua desde marzo de 2008. En todos los casos el trabajo estuvo relacionado con programas de financiamiento externo, y su modalidad de contratación fue siempre como monotributista. Cabe recordar que el estado está en falta con él y miles de trabajadores más, ya que en todos los años que tuvo relación laboral con distintos ministerios, nunca se cumplió con su derecho de pase a planta que hubiera impedido el despido y darle la estabilidad laboral.
“Si bien en el llamado me comentaron que actualmente no había trabajo para mí dentro de la estructura del Ministerio (Secretaría de Provincias), el día anterior (miércoles 25/03) recibí un mail por parte de una funcionaria del Ministerio solicitándome una serie de informes para redactar” afirmó el trabajador del organismo dependiente de Wado de Pedro. Esto se debe a que en muchos ministerios se está realizando teletrabajo o home office y solo se realizan guardias mínimas en los lugares físicos.
Sin embargo, este es solo el caso de un compañero específico que se comunicó con este medio, para notificar su caso. A modo de compensación los funcionarios le ofrecieron a él renovar el contrato por un mes más, pero hubo otros compañeros que no tuvieron ese "beneficio" de mes adicional, y hace treinta días quedaron sin su fuente laboral.
A los funcionarios no les importó dejar en la calle a trabajadores en pleno brote del coronavirus, donde los empresarios aumentan los precios todos los días y se hace imprescindible contar con recursos económicos para paliar las consecuencias de la crisis.
Cabe recordar que los trabajadores estatales en el caso de ser despedidos, no gozan de indemnización ni seguro de desempleo, como lo vivieron los más de 40 mil despedidos durante los cuatro años de Macri. Actualmente, siguen peleando por subsistir incluso anotandose para recibir los $10000 y ser parte de los 11 millones de personas que se anotaron para recibir el beneficio.
Para finalizar el compañero despedido en la dependencia pública agregaba:
“Me puse en contacto con La Izquierda Diario para colaborar con el flujo de información, ya que lamentablemente la situación actual nos obliga a estar separados y no poder tener un contacto estrecho con compañeros que pueden estar pasando la misma situación, y la búsqueda de soluciones parece compleja y desafiante. Al Señor Presidente le digo, que dentro del Ministerio a cargo del funcionario Wado de Pedro, que se sentó a su derecha durante la cadena nacional, no se está cumpliendo la normativa que su propia administración promulgó”.
Como se evidencio estos años con los despidos masivos del macrismo el estado, es el principal “precarizador” a través de distintas modalidades de contratación -monotributistas, contratos anuales y tercerizaciones- y gobierno tras gobierno se siguió valiendo de estas contrataciones para hundir cada vez más en la pobreza a miles de trabajadores estatales.
