Decenas de docentes y estudiantes de San Nicolás participaron de la movilización. El paro tuvo alta adhesión. Las conducciones gremiales siguen sin convocar a un plan de lucha.
Federico Berg @fedeberg80
Viernes 25 de mayo de 2018 09:31
Desde San Nicolás partieron decenas de docentes y estudiantes a participar de la segunda Marcha Federal, que culminó el 23 de mayo con un acto frente al Congreso donde confluyeron columnas desde todos los rincones de Argentina.
Fue un pronunciamiento fuerte y claro de las y los docentes de todo el país, que expresó un amplio repudio a las políticas de ajuste de Macri y los gobernadores. La movilización fue en el marco de un paro nacional acatado por la gran mayoría de los y las trabajadoras de la educación.
Pero toda esta fuerza puesta en movimiento no se reflejó en ninguna medida concreta, y el acto finalizó así sin llamados a la acción. Desde el bloque independiente de las seccionales y sindicatos dirigidos por la izquierda se exigió la votación urgente de un plan de lucha para echar al FMI, no pagar la deuda externa para aumentar significativamente el presupuesto para educación, y frenar el tarifazo, los despidos y el ajuste.
Nadie de la Celeste, que dirige Suteba y Ctera, planteó cómo piensan conquistar una escuela pública de calidad y salarios dignos, salvo un llamado a cantar el himno nacional el 25 de mayo.
Baradel habló de la necesidad de un paro general, a lo que la izquierda respondió: poné la fecha. Entre los sindicatos docentes, bancarios y metrodelegados, junto a estatales, judiciales y todos los que dicen querer enfrentar el ajuste, podrían convocar ese paro del que hablan, si así lo quisieran.
Esta actitud pasiva de las conducciones gremiales, en medio de una dura pelea contra los gobiernos provinciales y nacional que exige acciones contundentes y masivas, se reflejó en la dificultad que tuvimos en San Nicolás para garantizar lugares para viajar. Sólo Suteba puso transporte a disposición, pero limitando de antemano la capacidad.
La agrupación Marrón, parte de la oposición de izquierda en el sindicato, militó activamente los últimos días para sumar compañeras y que no quedara nadie sin poder viajar a la marcha. Finalmente fuimos más de 60 docentes y estudiantes, incluyendo delegaciones de la Escuela de Arte y del ISFD 127.
Estamos en una situación difícil, y el Gobierno se prepara para profundizar el ajuste. El macrismo está mostrando los dientes, como vimos esta semana en la represión contra las y los trabajadores del Subte y de Cresta Roja. El pueblo trabajador demuestra que tiene voluntad y fuerzas para enfrentarlo, pero necesitamos organización y contundencia. No podemos esperar más, necesitamos votar urgentemente un paro de lucha nacional, con la perspectiva de una gran huelga general de todo el pueblo trabajador.
No vamos a ganar si seguimos esperando a las elecciones de 2019. La única manera de que sean los empresarios los que paguen la crisis, y que no la carguen sobre las espaldas de los y las trabajadoras, es pelear ya mismo por el no pago de la deuda externa. Con ese objetivo la agrupación Marrón reforzó la jornada con un corte en el Obelisco que fue cubierto por todos los medios televisivos y radiales desde las 8 hasta las 11, junto a la agrupación Negra de la docencia de Neuquén que llevan 43 días de paro abandonados a su suerte por Ctera.